Su abogado dice que la decisión ha confirmado que ?este caso no es lo que parecía?.
El exdirector gerente del FMI Dominique Strauss-Kahn no tendrá que cumplir el arresto domiciliario, pero sigue imputado por las acusaciones de asalto sexual e intento de violación, según decidió ayer el juez Michael Obus.
“El juez ha hecho lo correcto”, dijo al término de la vista, Benjamin Brafman, el principal abogado defensor de Strauss-Kahn, que subrayó que tal como habían dicho, “este caso no es lo que parecía”.
El político y economista francés, de 62 años, compareció ayer ante el tribunal federal que lleva su caso después de que su defensa y la misma fiscalía de Manhattan encontrasen indicios que erosionan la credibilidad de su acusadora, la inmigrante guineana de 32 años que lo denunció el 14 de mayo por asalto sexual e intento de violación.
El juez, no obstante, decidió retirarle el pasaporte para evitar que pueda salir de Estados Unidos y tampoco le ha devuelto el millón de dólares que DSK y su familia depositaron ante el tribunal cuando se acordó el arresto domiciliario.
“Este caso no ha acabado, aunque usted lo haya podido oír así. Tiene que presentarse ante este tribunal el próximo 18 de julio, y espero que así lo haga usted”, le subrayó el juez Obus a DSK, a quien se vio sonreír a su salida del tribunal
DSK “es libre para viajar por el país donde quiera”, dijo Brafman a la prensa, al tiempo que aseguró que la decisión de ayer “es el primer paso” para que su cliente quede exonerado “por completo” de todas las acusaciones.
Al término de la vista, el abogado de la acusación, Kenneth Thompson, señaló que “hay pruebas médicas que evidencian que Dominique Strauss-Kahn atacó a la víctima y le hizo daño”.
Agregó que la alegación presentada por los defensores del Strauss-Kahn de que tuvieron una relación sexual consentida “es una mentira. Eso es lo único nuevo que la defensa ha presentado”.
Sobre el descubrimiento que la defensa habría realizado de las “mentiras” en que su clienta habría podido incurrir cuando pidió asilo político en Estados Unidos, Thompson señaló que “la víctima ha decidido por sí misma decir la verdad sobre cómo llegó a este país”.
El mediático y polémico caso en torno a los siete cargos que pesan en contra de DSK por asalto sexual e intento de violación, ha dado un inesperado giro después de que la defensa del político francés encontrase nuevos elementos que erosionan la credibilidad de la mujer y de que la fiscalía haya dado a entender que tenía dudas similares.