Comienza la semana clave para dilucidar el futuro de Unai Emery y el devenir del Sevilla. Es cuestión de días, o tal vez horas, para que el aficionado sevillista y, sobre todo, un confiado pero impaciente José Castro conozcan de primera mano la decisión definitiva del técnico vasco.

La oferta sevillista la tiene sobre la mesa desde hace varias semanas para ampliar un contrato que expira el 30 de junio de 2016 hasta el verano de 2019, a razón de unos 3 millones de euros por temporada. Pero la competencia llama a la puerta de uno de los entrenadores con mejor cartel en el mercado actual europeo. No obstante, en Nervión consideran que el míster no está en venta y ni mucho menos hay ni una mínima intención de darle la posibilidad de que se vaya sin intentar al menos convencerle. Y es que Castro lo tiene claro, el futuro Sevilla debe caer en la manos del técnico bicampeón de la UEFA Europa League.

“Creo que es un tipo listo, inteligente y serio, que siempre ha cumplido lo que ha dicho. Yo creo que la temporada que le queda la va a cumplir y lo que queremos es hacer un proyecto importante alrededor de él. Emery no sólo ha ganado títulos, ha entendido la idiosincrasia del club y eso vale mucho”, decía el presidente en los medios oficiales del club. Más claro agua.

Además, Castro, a sabiendas de que Emery lo que realmente exige son ambiciones deportivas, ofrece garantías de crecimiento en una temporada que será ilusionante. “Haremos el esfuerzo que sea necesario para hacer un equipo competitivo. Nos ha costado mucho llegar hasta aquí y tenemos que utilizar los medios y las personas que tenemos para dar otro pasito”.

 

La oferta napolitana

Toca esperar a que Emery decida. Principalmente sobre otra propuesta que maneja procedente del Nápoles. De Laurentiis, su presidente, le ofrece 3,5 millones por temporada, 3 años y libertad total en la planificación deportiva.