El nuevo entrenador del Athletic Club para las próximas dos temporadas, Ernesto Valverde, ha asegurado en su presentación que pese a que estuvo a punto de renovar con el Valencia CF finalmente optó por no hacerlo y en cambio aceptar una propuesta del club bilbaíno llena de "desafíos" a superar y alicientes que le impidieron decir que 'no' a una segunda etapa en el banquillo del club, en este caso en un San Mamés Barria que le gustaría inaugurar con victoria.

   "Entrenar al Athletic para mí es una responsabilidad muy grande por lo que representa, sé que es una segunda parte para mí y el dicho dice que no son buenas salvo la de 'El Padrino'. Parece que sea más difícil porque hay que cubrir una expectativa, pero supone más un desafío que otra cosa. No lo veo como algo negativo sino positivo", aseguró Valverde este viernes en rueda de prensa.

   Y es que el extremeño ve muchos retos por superar, con ganas ya que es "afortunado" por poder afrontarlos. Además del desafío de la segunda etapa, están los de entrenar a un equipo que ha quedado en peor situación en Liga que su anterior club, el Valencia, el de superar a un Marcelo Bielsa muy querido por la afición del Athletic, el de rehacer el equipo tras la marcha de pilares como Javi Martínez, Fernando Llorente y Fernando Amorebieta o el de estrenar el nuevo San Mamés.

   "Son muchos alicientes como para decir que no, estoy dispuesto a ello. Pido ayuda de todos y que miremos hacia adelante, que todo lo que tenga que venir que sea bueno. Es un equipo joven que puede ir hacia adelante. Cuando debuté con el Athletic me propuse como reto el poder llegar a Europa. Ahora, me gustaría pensar hacia arriba y que tendríamos que estar ahí pero no lo sé, me gustaría tenerlo más claro. A falta de dos jornadas se manejaban en los puestos de abajo, tenemos que esperar, pero espero que tengamos potencial", comentó sobre la plantilla que se encontrará.

   Además de esperar refuerzos para la confección de la plantilla, confía en los 'cachorros'. "Nunca he sido reacio a que suba gente del filial si tiene nivel suficiente, aunque aquel tiempo la economía era peor. Si existen jugadores de nivel en el filial lo valoraremos, conozco a algunos porque les he visto jugar", reconoció.

"LO BÁSICO LO TENEMOS TODOS".

   Eso sí, pese a que estuvo hace ocho años como técnico, este Athletic es diferente, y él será nuevo para sus jugadores. "Miro muchas veces para atrás, cuando empecé a entrenar, y pienso en decisiones que tomé y cambiaría muchas de ellas, otras las mantendría. Lo básico lo tenemos todo, encontraré a jugadores que habrán evolucionado, como Gurpegi e Iraola, pero la esencia de ellos será la misma. En mi caso será parecido, algunas cosas habré mantenido y otras que habrán cambiado. Voy a ser bastante desconocido para el equipo, no he entrenado a nadie salvo a ellos e Iraizoz", reconoció Valverde.

   En cuanto al estilo de juego, similar al de su predecesor; cambiará cosas pero la base que deja Bielsa ya le agrada. "Tengo que analizar un poco el equipo, lo ha que hecho estos dos últimos años con Bielsa. Hay cosas positivas a mantener y otras que podamos cambiar, que a mí me guste hacer de otra manera. A mí me gusta que mi equipo sea agresivo en ataque y defensa, que se imponga", argumentó.

   "No he sido muy consciente de eso (gritos de 'Bielsa, quédate!'), más de que la gente del Valencia me dijera que me quedara. Estuve a punto de renovar, pero por muchas cosas en el último mes me hicieron tomar otra decisión, y esto me ha hecho dudar más que no el apoyo a Bielsa", aseguró sincero el técnico.

   Y es que de una forma u otra, el exfutbolista cree que siempre tendrá presión. "Estamos acostumbrados a vivir con presión, por una cosa o por otra. No creo que tenga más presión ahora que antes, que de hecho era una apuesta difícil por un entrenador de la casa. Salió bien y espero que ahora también. Los resultados siempre son consecuencia de lo que hagas y calman a todo el mundo", señaló sobre el hecho de que pueda ser mirado con lupa en los primeros partidos.