Desde que comenzó la temporada de baño el pasado 10 de junio, hasta el 13 de agosto, el servicio de salvamento y socorrismo ha realizado diez rescates, 112 asistencias de primeros auxilios y ha registrado cinco incidencias, según ha informado el concejal de Playas, Rafael León, a raíz del informe realizado por la empresa concesionaria, Socoservis Socorrismo y Servicios S.L.
Del total de rescates, cinco de ellos se limitaron a ayudar a los bañistas a salir del agua y otros cinco supusieron operaciones de salvamento, dos de ellas en Sobrevela, dos en Levante y una en Santa Bárbara.
En lo que respecta a los primeros auxilios, la mayoría han sido por heridas leves y picaduras de insectos, erizos, pez araña o medusas, además de algunas quemaduras, mareos o luxaciones.
Las cinco incidencias registradas han consistido en dos presencias de tablas o barcas de remos y una embarcación con motor en zona de baño, un caso de pesca no autorizada y la custodia de una cría de delfín muerta hasta su retirada por el personal autorizado.
Las playas de Levante, Santa Bárbara y Sobrevela acumularon el mayor número de banderas rojas. En estos 65 días, las playas en las que se ha izado mayor número de veces esta bandera roja han sido Levante, con 27 prohibiciones de baño, y Sobrevela y Santa Bárbara, con 20 cada una. Por contra, la playa de Poniente ha lucido bandera verde todos los días, salvo en cinco ocasiones con bandera amarilla y dos, roja.
Rafael León espera que la ausencia de accidentes e imprudencias de carácter grave siga siendo la tónica hasta el final de la temporada, e insiste en la importancia de la prudencia “respetando las prohibiciones y normas en vigor y siguiendo las indicaciones de socorristas y controladores, carteles y megafonía, para disfrutar de las playas con seguridad durante el resto del verano”.
Por otro lado, también se refirió a que, a excepción del desalojo de un sector de Santa Bárbara el día de San Juan, no ha sido necesario cerrar ninguna otra playa por exceso de aforo conforme a las normas sanitarias para la prevención de Covid-19, “un hecho propiciado por la extensión del litoral linense, que a lo largo de sus 14 kilómetros tiene capacidad para admitir un número considerable de usuarios, manteniendo la distancia de seguridad”, manifestó el edil.