Declara en Ceuta una persona que trasladó desde Algeciras la embarcación empleada para el traslado
Dos patrones, que presuntamente pilotaban una embarcación que llegó a Ceuta procedente de Marruecos en noviembre de 2017, se enfrentan a una pena de 24 años de prisión por la muerte de cuatro de los 25 inmigrantes subsaharianos que viajaban a bordo y que fallecieron al ser arrojados al mar.
El juicio contra estos dos acusados, así como contra un tercer colaborador, se ha celebrado hoy en la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz, en Ceuta, y ha quedado visto para sentencia.
El Fiscal ha pedido que se les imponga una condena de 24 años de prisión a los dos patrones por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros (ocho años) y por homicidio imprudente (cuatro años por cada fallecido).
El tercer acusado, Mohamed A., se ha conformado con una pena de tres meses de prisión (de los seis que pedían inicialmente) por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
La defensa, por su parte, ha solicitado la libre absolución de los dos acusados por falta de pruebas contra ellos, por lo que el juicio ha quedado visto para sentencia.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del 19 de noviembre de 2017 cuando, según el testimonio ofrecido en la sala por los dos guardias civiles que participaron en el operativo, la Guardia Civil recibió una notificación de que en la población de Castillejos (Marruecos), distante unos cuatro kilómetros de la frontera ceutí, estaban cargando a un importante número de personas en una embarcación.
Conforme al testimonio de los dos agentes, la Guardia Civil se dirigió hacia la playa del Tarajal de Ceuta y consiguió interceptar la embarcación, comprobando que se trataba de una semirrígida de entre 8 y 9 metros en la que viajaban 25 inmigrantes subsaharianos, ninguno de ellos con chaleco salvavida.
Así, en un primer momento el patrón detuvo la marcha pero posteriormente, cuando se acercó la patrullera de la Guardia Civil, emprendió una veloz huída a pesar de las adversas condiciones del mar.
Según han señalado al tribunal los dos guardias civiles, el patrón llegó hasta la otra costa de Ceuta y empezó a lanzar a los inmigrantes al mar cerca de la playa de Santa Catalina, embarrancando posteriormente la embarcación en la orilla y dándose el patrón y su acompañante a la fuga por tierra, sin poder ser detenidos.
En la intervención murieron cuatro inmigrantes subsaharianos y las posteriores investigaciones de la Guardia Civil permitieron el arresto de Karim M.L., Ismael A.M. y Mohamed A.S., todos ellos vecinos de Ceuta.
Tres de los inmigrantes fallecidos pudieron ser recuperados por los GEAS de la Guardia Civil mientras que el cuarto se dio por desaparecido, han relatado los agentes.
Los dos patrones han negado su participación en los hechos, alegando que habían llevado la embarcación semirrígida a Marruecos para obtener una documentación, mientras que Mohamed A. sí ha reconocido que participó en el intento de introducir inmigrantes de forma clandestina en España, inculpando además a los otros dos acusados.
Mohamed A.S. se ha negado a declarar pero ha dicho que los otros dos acusados -Karim y Ismael- fueron a Marruecos para preparar el viaje de los inmigrantes.
En el juicio también ha prestado declaración un testigo, Morat A., que fue quien se encargó de traer desde Algeciras la embarcación utilizada a cambio de dinero, sin saber que la misma iba a ser empleada para este fin.
Sin embargo, uno de los guardias civiles que ha prestado declaración ha señalado que en la sala de espera del juicio reconoció a este testigo, Morat A., como el patrón de la embarcación que conducía la semirrígida esa noche y que, en un primer momento, estuvo investigado.
Este testigo se marchó de la sala de juicio antes de poder ser arrestado.