Once fotógrafos se han unido en un grupo que ellos califican como colectivo poliédrico de artistas plásticos dedicados plenamente a la creación a través de la fotografía. Hasta el próximo 31 de agosto, la sala de exposiciones del Castillo de Guzmán El Bueno de Tarifa acogió su primera muestra colectiva, que lleva por título Fortalezas. El horario para visitarla es de 10 a 17:30 horas, de lunes a domingo
El concepto de concebir la fotografía como una creación artística es el nexo en común, además de haber participado de una y otra manera en UFCA, la unión de fotógrafos ubicada en Algeciras y que es un referente nacional. A partir de estas coincidencias, cada uno tiene su propio estilo, su propia visión de la fotografía.
Los fotógrafos que forman Ecléctico son Pepe Gutiérrez, Blanca Morales, Marcos Moreno, Natalia Leiva, Alexis Edwards, Tania Luca, Manuela Quirós, Enzo Elbaz, Paco Tamayo, Carolina Santos Floriano y Alejandro Cuerda.
No todos ellos son del Campo de Gibraltar, ni siquiera de España, pues algunos llegan desde el extranjero. Ni todos llegan al mundo de la fotografía ni la ejercen de la misma manera. Tanto los contenidos como los medios técnicos empleados por cada uno son diferentes, y sorprendentes, y van de la fotografía tradicional, al fotoperiodismo pasando por la imagen pictórica en técnica mixta. Eso sí, cada uno de estos artistas apuesta por la excelencia en sus imágenes y les une la pasión por la fotografía.
Los miembros del colectivo son fotógrafos nacionales e internacionales con relevante aportación en el desarrollo de la fotografía como disciplina artística. Proceden de diversos ámbitos creativos y se dedican a la fotografía tanto de manera profesional como vocacional.
Fortalezas es una exposición de temática abierta que recoge la energía de las fortificaciones monumentales, personales y psicológicas. Reúne visiones sobre las fortalezas que contienen invasiones y su vez albergan sociedades, y permiten el desarrollo de las artes y las ciencias. La fortaleza entendida como fragilidad y belleza, rasgos infinitos de la condición humana.
El visitante de la muestra podrá apreciar a grupos de personajes atrapados en el éxodo forzado de sus países en camino a un destino mejor (Marcos Moreno). También mujeres y hombres singulares que soportan mundos inabarcables e inciertos (Blanca Morales y Natalia Leiva). Teatros de la vida cotidiana bañados por luces milagrosas (Paco Tamayo) comparten escenario con paisajes poéticos e intimistas (Tania Luca) entre otros muros construidos piedra a piedra sueño a sueño.
Pepe Gutiérrez transforma la realidad en visiones casi oníricas, enteladas de nieblas y brumas atemporales que tan a menudo habitan el Estrecho haciendo del otro lado un misterio latente.
Blanca Morales apuesta por retratos intimistas y en su serie ‘En Cuerpo y Mente’ realiza un recorrido por el cuerpo humano, sin olvidar la esencia del ser, y de cómo se muestra ante los demás.
Marcos Moreno, un referente internacional en la fotografía de prensa. En esta exposición ofrece una de sus series de imágenes de un campo de refugiados en Kosovo. Una pequeña fortaleza que alberga el drama humano de estos hombres y pocas mujeres, en su ciega lucha por escapar a cualquier precio de sus ya devastados países.
Alejandro Cuerda trabaja con formas en las que las imágenes fotográficas puedan encontrar otros significados diferentes a su origen más descriptivo. Es como un intento de mirar y expresar lenguajes del adentro emocional a través de lo cotidiano.
Manuela Quirós presenta su trabajo Somnium, un mural compuesto de varios bodegones paisajes y una figura zoomórfica. El resultado es un retablo pictórico que sugiere las luces de los maestros de la pintura con los trazos de colores al óleo y esfumados de pastel. Fotografía como sustento de la pintura y viceversa.
La artista multidisciplinaria Carolina Santos trabaja con la fotografía piezas únicas. Su trabajo discurre entre la instalación, video, ilustración, actuación, etc., siendo la fotografía su principal medio de expresión. Muchos de sus proyectos son participativos, implicando al espectador y haciéndole colaborar durante el proceso creativo.
Tanya Luca es una fotógrafa moldava que trabaja en blanco y negro, heredera de la tradición de los grandes maestros del Este. Captura paisajes boscosos y urbanos donde deja caer su presencia en segundo plano en los reflejos de cristales rotos y hielos translucidos de su ciudad Chisinau.
Lluc Queralt, artista plástico, regala sus apuntes de viajes exóticos franqueando los muros de culturas y civilizaciones lejanas. Sus fotografías juegan con las luces y los encuadres. Las siluetas de figuras religiosas y transeúntes son parte de su entorno poético y personal.
Paco Tamayo reúne sus sobrias tomas en blanco y negro para adentrarse en el mundo del Estrecho. El entorno arquitectónico urbano interactúa con la naturaleza y los personajes, casi invisibles que dejan sus huellas en la arena o miran de reojo la luz cambiante del Estrecho.
Natalia Leiva s regala su retablo porteño ¨De tripas corazón” en el que prescinde de vísceras para mostrarnos las almas. No hurga en las heridas ni tampoco las obvia. Crudeza sin acritud, respeto ante el espanto de un lugar negado. La Marina de Algeciras, la de las noches sin luna repleta de lóbregos rumbos.
El comisario de la muestra, Alexis Edwards presenta dos grandes piezas parte de su serie “Mitológicos”. Un trabajo en la que el artista ofrece dos puestas en escena donde la realidad no parapeta a su universo imaginario. El sujeto encaja una realidad paralela donde la fantasía y la imaginación vuelan alto.
Enzo Elbaz presenta unos dípticos a modo de páginas de libro donde explora las fronteras del este de Europa. Los Balcanes y los Urales ya formaban una frontera geográfica pero también lo hicieron con los pueblos asiáticos y los otomanos, quienes dominaron gran parte de este territorio Europeo. En la actualidad Macedonia, Bulgaria, Rumania funden esa tradición con la urgencia de mantener el paso cruel de la globalización.