Tras la primera noche de fiesta por el ascenso a Segunda división B del Algeciras CF, ayer le llegó el turno a una tarde para los actos insitucionales y el reencuentro con la afición en la Plaza Alta.
La primera plantilla acudió al completo al Ayuntamiento de Algeciras para la recepción por parte del alcalde, José Ignacio Landaluce, y el equipo de gobierno. El primer edil destacó que el equipo “ha conseguido unir a toda la ciudad en torno a sus colores”, y que “habéis sido capaces de hacer que lo difícil, lo épico, lo complicado, pareciese sencillo, aunque no lo era, pero en vuestras botas, la magia del fútbol se materializó en goles, y los tantos, en ascenso”.
Landaluce impuso al presidente del club, Francisco Javier Gudiel, la insignia de la ciudad, y éste le hizo entrega de la camiseta del ascenso.
Mientras en la Plaza Alta se celebraba una fiesta infantil, el equipo salió del Consistorio para realizar la ofrenda floral a la Virgen de la Palma, patrona de la ciudad. La hermandad titular de la iglesia le hizo entrega de una imagen de la Virgen a todos los integrantes de la plantilla.
A la calle
Y tras los actos institucionales, los futbolistas y miembros del cuerpo técnico y directiva fueron subiendo uno a uno al escenario de la Plaza Alta para ser agasajados por su afición. Marín y Antonio Merino ejercieron de maestros de ceremonia, con arte y sin vergüenza, para derramar la alegría por el ascenso.