El alcalde de Cádiz, José María González, acompañado de varios concejales, ha visitado esta mañana la iglesia de San Juan de Dios, donde ayer se produjo la caída de un cascote a la plaza durante el paso de las procesiones de Semana Santa.

El alcalde, junto a técnicos de Protección Civil y Policía Local, se ha reunido con el presidente y varios miembros del Consejo de Hermandades y Cofradías de la ciudad y de la Hermandad de la Sed y cofradía de la Expiración (que procesionan hoy, Viernes Santo) y de la cofradía del Santo Entierro -que lo hará mañana sábado- para estudiar las precauciones que deben tomar durante los respectivos recorridos. 

Durante la mañana de hoy, Bomberos han resanado la zona del campanario de la Iglesia de San Juan de Dios para evitar desprendimientos. No obstante, se ha acordado acotar la zona para que no haya público y así evitar posibles incidentes.