Tanto la presidenta de la Fundación Mujeres, Marisa Soleto, como la de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, se han referido así a las afirmaciones del Papa sobre el uso del preservativo en el libro "La luz del mundo. El Papa, la iglesia y las señales del tiempo. Una conversación con el Santo Padre Benedicto XVI".
El libro saldrá a la venta el próximo 23 de noviembre, y el diario vaticano "L'Osservatore Romano" publicaba ayer un resumen.
Soleto ha subrayado que, en cualquier caso, "todo lo que ayude a utilizar un instrumento que salva vidas bienvenido sea" aunque ha insistido en que la Iglesia "debería manifestarse más contundentemente".
Ha considerado que la vía por la que el Papa ha hecho estas manifestaciones no es la habitual de la Iglesia y ha criticado que el Pontífice haya limitado el uso del preservativo y haya puesto como ejemplo el de la prostitución.
"Bien la declaración en sí misma de que el uso del preservativo está bien, mal el contexto en que lo hace y mal el caso al que se refiere", ha aseverado Soleto.
Por su parte, Besteiro ha estimado que la posición del Papa supone un "pequeño avance" frente a la postura anterior en la que no admitía el uso del preservativo en ningún caso.
No obstante, la presidenta de la Federación ha subrayado que el trasfondo "sigue siendo el mismo" ya que si bien el Papa justifica el uso del preservativo en algunos casos, luego precisa que "no es la manera de combatir el sida, ya que es necesaria una humanización de la sexualidad".
Besteiro se ha preguntado qué entiende el Papa por "humanización de la sexualidad" y ha señalado que lo que sí parece claro es que Benedicto XVI no admite la libertad sexual de cada individuo.