El colectivo inmigrante es el que registra un mayor aumento de compradores de fármacos por internet en España, fundamentalmente porque creen tener dificultades de acceso a la medicina.

Así lo dijo ayer el presidente de la Unión de Consumidores de España, José Ángel Oliván, en declaraciones a los periodistas antes de intervenir en la jornada nacional “Medicamentos falsificados:un riesgo creciente”, que organizada por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias se ha celebrado en Oviedo.

Aunque el mercado español es “uno de los menos afectados” por el creciente fenómeno de adquisición de fármacos a través de internet, con el riesgo de falsificación que esto supone, los medicamentos relacionados con la disfunción eréctil y el culto al cuerpo continúan encabezando las compras on- line de los españoles.

Este tipo de compradores no suele denunciar a los suministradores en caso de fraude para preservar su intimidad y porque consideran vergonzantes los medicamentos adquiridos.

En el caso de los inmigrantes, rehúsan hacerlo por desconocimiento de los mecanismos de reclamación, según explicó Oliván.

También participó en la jornada la presidenta del Colegio de Médicos de Asturias, Carmen Rodríguez, que recordó que el Colegio de Farmacéuticos pretende frenar la “automedicación cibernética” por el riesgo que entraña para la salud del paciente y la posibilidad de que sean falsos.