Tras las últimas gestiones de la Delegación municipal de Seguridad Ciudadana, la Policía Local de Arcos de la Frontera cuenta desde esta semana con un etilómetro portátil con el que puede medir los niveles de alcohol que un individuo puede registrar durante un control.
Este equipamiento tiene fines eminentemente preventivos, pues de lo que se trata, principalmente, “es de impedir que conductores con niveles de alcohol no permitidos puedan seguir conduciendo tras un accidente de tráfico”. Por tanto, según la responsable del área, María José González, “es una herramienta demandada por los policías locales que redundará en mayor seguridad en el tráfico”.
Este equipamiento se puede usar en tres casos: tas comprobarse una infracción, tras producirse un accidente de circulación y en controles preventivos.Esta última opción, no obstante, necesita de una planificación previa.
El etilómetro móvil, que los agentes llevarán en el vehículo, cuenta con la ventaja de imprimir inmediatamente el resultado del análisis del aire expulsado por el conductor, sirviendo de base para las acciones que los policías tengan que llevar a cabo.
Estos nuevos medios técnicos se suman a la incansable tarea de la Policía de Arcos por mejorar la seguridad vial. En este campo, el cuerpo de seguridad se implica de forma muy importante impartiendo clases durante todo el curso escolar a cientos de alumnos de los distintos colegios de la localidad.