La Junta de Andalucía pide al Gobierno de España “un mando único” de cara a la decisión de los cierres perimetrales de las comunidades autónomas durante la Semana Santa. El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha indicado este jueves que “de nada sirve que unas comunidades cierren y otras abran, esto confunde a los ciudadanos, o todos cerramos o todos abrimos”.
En la misma línea ha opinado el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, quien ha añadido que “no puede haber en este caso 18 formas de interpretar la norma, como sucedió en Navidad”.
La Junta cree que es la mejor manera de que se coordine la movilidad ente comunidades para unos días de vacaciones que suelen tener un amplio número de viajes y, de esta manera, se evitaría confundir a la población abriendo en unas zonas y cerrando en otras.
Marín también ha anunciado que la decisión sobre la apertura entre provincias andaluzas se podrá tomar en siete o diez días, y que esa decisión dependerá de la evolución de la cepa británica.
Por ahora, la pandemia parece estar dando una tregua en Andalucía, al descender su incidencia en los últimos días. De hecho, Andalucía registrará desde este viernes un total de 404 municipios de todas las provincias menos Almería y Granada, entre ellas cinco capitales -Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla- en nivel de alerta 2 como consecuencia de la situación crítica epidemiológica derivada del Covid-19, en los que el horario de comercios, actividades y servicios (incluida la hostelería) se ampliará hasta las 21.30 horas.
Otras 320 localidades de las provincias de Almería, Cádiz, Granada, Jaén y Málaga se encuentran en nivel 3 grado 1, 74 municipios más en nivel 4 grado 1 y ocho más en nivel 4 grado 2, que implica suspensión de toda actividad no esencial por superar la tasa de incidencia de 1.000 casos por cada 100.000 habitantes.
Desde el Gobierno andaluz, ante las nuevas medidas, ha pedido “prudencia” a la ciudadanía para “evitar la cuarta ola” de la pandemia. Sin embargo, las nuevas medidas puestas en marcha por la Junta han provocado críticas desde las fuerzas políticas de la oposición. El PSOE ha criticado que el Gobierno andaluz descargue la responsabilidad en la gente y no asuma sus obligaciones como abrir los centros de salud y Adelante ha pedido que se refuerce la Atención Primaria.