Según informaron fuentes de la Delegación Provincial de Salud, este tipo de cirugía ha experimentado en la última década un incremento “notable”. De hecho, se ha pasado de las 2.718 intervenciones este tipo de 1999 a las 22.559 del pasado año.
En cuanto a los procesos asistenciales más comunes, se encuentran el tratamiento de uñas encarnadas; la extirpación de pequeños fibromas; los quistes sebáceos; las verrugas; el drenaje de abscesos; la limpieza, desbridamiento y sutura de heridas; así como la extracción de cuerpos extraños en las heridas.
Fuentes sanitarias indicaron también que las técnicas más utilizadas son la exéresis quirúrgica --incisión en la piel para retirar tejido y que precisa de un par de puntos de sutura-- y la crioterapia --aplicación de frío sobre la piel, que produce una destrucción local de tejido de forma eficaz y controlada--.