Amede, la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática de San Fernando, suma una nueva identificación positiva de personas represaliadas por el régimen franquista. Se trata de Ramón Vega Román, la víctima 478, cuyos restos fueron exhumados de la fosa 8 del cementerio municipal de San Fernando por el equipo de la citada asociación.
Como confirman desde la asociación, se trata de uno de los seis vecinos de Grazalema ejecutados en la madrugada del 20 de julio de 1938 en San Fernando.
Zapatero de profesión, Ramón Vega estaba casado con Ana Castro Sánchez y fue asesinado a los 41 años. Dejó siete hijos, el más pequeño de solo seis años de edad. Junto a él, compartieron destino Julián Álvarez Calle, jornalero, de 27 años; Juan Gómez Pérez, panadero, de 29 años; Francisco Palacios Tornay, jornalero, de 30 años; Pedro Rincón Román, zapatero, de 22 años y Diego Román Palma, jornalero, de 27 años
En este caso, la diligencia de enterramiento del Sumario 175-37 resultó de gran ayuda para su localización, al especificar que “… fueron inhumados en la fosa común, cuarta, de la manzana Letra A y colocados de la siguiente forma: Ramón Vega Román, con cara al norte; Francisco Palacio Tornay, con cara al sur; Diego Román Palma, con cara al este, Pedro Rincón Román también con cara al este; Julián Álvarez Calle, con cara al oeste y Juan Gómez Pérez, con cara al este, donde quedaron sepultados…”.
Ha sido una de sus nietas, Ana Román Fernández, quien ha luchado por la recuperación de su cuerpo, acudiendo a los laboratorios Labgenetics, después de las identificaciones presuntivas realizadas por el equipo técnico de Amede tras no encontrarse vínculo genético desde los laboratorios de la Universidad de Granada.
Ramón Vega Román podrá volver 87 años después a Grazalema, su localidad de nacimiento.
