El escritor Lorenzo Silva ha denunciado en sus redes sociales las dificultades administrativas con las que se ha encontrado para cobrar una factura al Ayuntamiento de San Fernando por su participación en la Feria del Libro de 2023 y por las que ha decidido renunciar al cobro de sus honorarios.
Lo ha hecho a través de un relato titulado ‘Un regalo de Reyes’ a modo de reivindicación de los autónomos, en el que describe los golpes que se ha dado contra la pared por el sistema de tramitación electrónica del Ayuntamiento exigido para el cobro de su factura.
No ha habido final feliz, o sí, puesto que en su escrito ha pedido expresamente que ese dinero se destine para la compra de juguetes de los niños sin recursos de San Fernando. “Prefiero que de toda esta triste historia salga algo bueno, antes que dilapidar mi tiempo redactando demandas y el de la justicia, que tan sobrecargada está, dirimiendo esta nadería”, indica en su escrito subido en sus redes en la víspera de Reyes.
Tal y como ha detallado, el quid de la cuestión está en que el Consistorio isleño le pide que presente la factura vía FACe, un procedimiento, como él mismo ahonda, “por el que el contribuyente da de alta la factura, previamente elaborada de forma electrónica, en el registro de la Administración para que esta la valide y proceda al pago”.
Los trabajos y los días - Regalo de Reyes
— Lorenzo Silva (@VilaSilva) January 5, 2025
Relato navideño inédito. O cómo darle un final feliz a una triste historia de la (ciber) burocracia española.
Con mi afecto y gratitud para los lectores de San Fernando, Cádiz, y mis mejores deseos para todos.https://t.co/pANqeNr3HO
“Es un sistema que traslada buena parte de la carga burocrática al administrado, y que le obliga además a cambiar todo su sistema de facturación: no basta con hacer una factura en formato electrónico o firmarla por ese medio —como hacemos con relativa frecuencia los autónomos—. Hay que implantar un sistema nuevo que genere la factura electrónicamente de un modo verificable según establece la ley. Un sistema que, además del coste administrativo, tiene un coste económico”, precisa en su relato.
Se trata de una facturación, como reconoce, “que es que es obligatoria para las personas jurídicas desde el año 2013 en sus relaciones con la Administración en virtud de la Ley 25/2013, resulta opcional para las personas físicas (por el momento)”, recalca, remitiéndose a la normativa vigente y que, en su opinión, supone una “ sobreexigencia administrativa” y económica y “una forma de impuesto”, que no comparte.
"No era la primera vez que me pasaba"
Una exigencia que, como él mismo reconoce, “no era la primera vez que me pasaba”, dado que “ya otros interventores de otros ayuntamientos me lo habían exigido antes”. La diferencia estriba en que en otros casos le acabaron permitiendo facturar en papel.
No en el Ayuntamiento de San Fernando, dado que, como le respondieron a su alegación, tanto la ordenanza municipal como el decreto que aprobó el gasto para su participación en la Feria del Libro exige que los autónomos facturen vía FACE. Un requisito que, como ocurre en todos estos casos, venía recogido expresamente en el contrato firmado, donde se detallaban dichas condiciones. De hecho, si Silva quisiera cobrar mañana mismo podría hacerlo, como el resto de los autónomos que trabajan con el Consistorio isleño, siempre que presentara su factura electrónica en los términos requeridos.
Silva, que presentó un recurso administrativo discrepando sobre el peso que el Ayuntamiento da a la ordenanza con respecto a la ley, se queja de que el Consistorio “nunca le contestó”, ha recibido el apoyo público del presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomo, Lorenzo Amor, y del PP de San Fernando, que ha calificado lo ocurrido de “sorprendente” y ha pedido a la alcaldesa Patricia Cavada que dé explicaciones de lo ocurrido.