El Cuvillo probará al líder en un nuevo tanteo de solidez

 Una semana como líder en solitario y segunda compartido, ha supuesto recuperar la sonrisa e insuflar aires nuevos y mejores sensaciones, en un entorno que saborea nuevamente las mieles del triunfo de su equipo. Cinco temporadas después el Racing Portuense nuevamente comanda la clasificación. En primer lugar y sin nadie por delante se siente observado por el resto de equipos que le preceden.
Solamente la inclusión de Lolo Prado que vuelve a la convocatoria y la ausencia de José Antonio, son las únicas novedades en la lista de convocados. Este Racing Portuense continuará dando continuidad a los mismos jugadores que tan brillantemente están escribiendo un inicio de Liga más que prometedor. Razones hay para ello. Siete días después de conseguir la tercera victoria consecutiva en Córdoda, hoy, ante los suyos intentarán hacer la máxima; sumar la cuarta.

Stop a la euforia

No será tarea fácil, la presión, los nervios, la euforia pueden jugar malas pasadas y el peor enemigo que puede encontrarse precisamente esta tarde, son ellos mismos. Sin olvidarse del rival que visita el José del Cuvillo,un Ayamonte que aunque aún no conoce la victoria, a buen seguro que no lo pondrá nada fácil en un conjunto que mantiene la base del año pasado cuando accedieron a los play off de ascenso.
Ausente José Antonio por sanción, la novedad en el once inicial pudiera llegar en Álex Torres que debutaría como titular en la presente Liga. El rápido jugador portuense en los minutos de los que ha dispuesto demostró que puede tener sitio en un equipo que por su trabajo, disparos con ambas piernas y desparpajo, pueden llegar a convertirse en un complemento ideal. Por lo demás poco o nada debe variar. Arriba estará nuevamente un enrachado Villalustre que suma dos goles que valieron seis puntos. Mantener la puerta a cero debe ser un factor sino decisivo si muy importante.

Corbeto no se fía y aparta la euforia de los suyos

No hay nada peor que verse ganador antes de disputar un partido de fútbol. Sentirse vendedor no hace más que alimentar una derrota segura antes de salir a jugar. El papel fundamental que se juega dentro del vestuario es una pieza importantísima en cuanto a la concienciación mental. Confiar en uno mismo no debe confundirse en relajación ni en demostraciones de confianzas. Estas poco o nada ayudan para mantener la misma línea de trabajo de hasta entonces. La semana con más mensajes psicológicos de lo normal, transcurrió con el convencimiento que este es el camino a seguir pero que la Liga nada más acaba de empezar y que mayo aún queda muy lejos. La línea exultante en la que ha entrado el equipo portuense tras las tres victorias consecutivas, han encendido las alarmas en torno al míster roteño Paco Corbeto. Este no quiere que sus hombres se distraigan ante tantos halagos y caigan en la trampa de la distracción ante tanto mimo. Las confianzas y las alabanzas pueden resultar ser las peores compañías de viaje de este equipo que se siente cómodo en lo más alto de la tabla aunque sabedor que de la gloria al infierno, y más en fútbol, hay un paso demasiado estrecho. Sea como fuere, nadie podrá borrar las tres victorias ya sumadas.

Cinco años después juegan como líderes en el Cuvillo

Cinco temporadas han tenido que pasar para ver de nuevo un partido en el feudo racinguista con el equipo como líder. Cinco años sin ver al conjunto portuense en lo más alto de la tabla en el Grupo X de Tercera. La última vez que ostentó tan privilegiada posición ocurrió en la temporada 2005-2006 tras vencer 0-1 al Pozoblanco. A la siguiente jornada, la número 13, el Racing se colocaba líder en solitario tras desbancar al CD San Fernando. Al domingo siguiente, los racinguistas, ya como líderes, recibirían al Bollullos que al igual que hoy también es onubense. En aquella ocasión, los portuenses vencieron por la mínima a un equipo que terminaría descendiendo. Desde aquel entonces y entrenados por José Luis Burgueña, comandarían la clasificación el resto de la temporada ascendiendo a 2ª B.