Desde la dirección de este medio se me pidieron dos cosas cuando me postulé como columnista quincenal. Lo primero fue que me mojase en los temas y lo segundo que fuese puntual entregando los artículos. Os puedo asegurar que lo primero lo cumplo escrupulosamente cada dos semanas, mientras que la puntualidad en la entrega… pues eso.
Hoy me voy a mojar, pero no precisamente para poner sobre la mesa el debate sobre el celibato de los sacerdotes de la mayoría de las iglesias cristianas. Quiero poner en valor el último ensayo “El Cristianismo en España” del jiennense José Manuel Santa Bárbara. Un libro fresco, directo y muy fácil de leer en el que puedes descubrir muchas curiosidades de la relación entre España y el Cristianismo durante siglos. Un ejemplo de ello es la imposición del celibato para los sacerdotes allá por el siglo IV cerca de lo que sería Granada y lo decidieron (entre otros) los obispos de Córdoba y Guadix (en mi cabeza sonaba la conversación con sendos acentos). Pero sin quedarnos en lo anecdótico y lo superficial tras leer este libro tengo en mi mente la inevitable pregunta de si España le debe al Catolicismo su cohesión y razón de ser o es más bien nuestro país el que crea su modo de ver y entender la religión cristiana.
Sé que vivimos todos pegaditos a nuestro móvil consumiendo información fast-food y, por eso, es fácil subestimar la relevancia de otras prácticas como la lectura de ensayos históricos. Para un servidor, este tipo de libros (y en concreto el protagonista de este artículo) suponen un viaje al pasado, una forma de comprender quiénes somos y cómo llegamos a serlo.
Leer ensayos sobre nuestra historia no solo enriquece nuestra comprensión del pasado, sino que también nos equipa con las herramientas necesarias para abordar el futuro con perspectiva y hasta cierta sabiduría. Explorar, reflexionar y aprender de aquellos que nos precedieron debería ser un deber moral como ciudadanos. Tendríamos una sociedad más respetuosa consigo misma y más consciente de su existencia.
Volviendo al título que nos concierne, en él encontraremos influencia de otras religiones tanto monoteístas como politeístas, la debacle católica de las últimas décadas, el Carlismo desde su nacimiento hasta la relación con los movimientos nacionalistas de la España actual… El ensayo repasa la dupla “nación-religión” que a lo largo de los siglos construyen en conjunto una retroalimentación mucho más férrea de lo que podemos imaginar.
Si eres de los que levantas las cejas con curiosidades sobre la historia estoy seguro que entre las páginas de “El Cristianismo en España” vas a disfrutar como un niño en un parque de atracciones.
Estamos acostumbrados a comprar, regalar y leer libros de autores conocidos. Ahora tenemos la oportunidad de acceder a una auténtica fuente de datos interesantes y curiosidades que no conocíamos de la mano de un autor de la tierra.
