El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) ha emitido un nuevo informe, que evalúa el riesgo de la población ante la evolución de la pandemia hasta el 31 de enero de 2022, donde pide a los países de la UE y del EEE que focalicen sus acciones en vacunar a los no vacunados; mantener las medidas de salud pública en vigor durante las vacaciones y, en la medida de lo posible, administra ya la dosis de refuerzo a mayores de 40 años, ancianos y personas vulnerables.
Tras su publicación, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha dicho que "está claro que debemos intensificar la vacunación para controlar la pandemia" y ha confiado en poder "convencer" a la población que aún se resiste a la inoculación. "El refuerzo debe estar disponible para todos los adultos, con prioridad para los mayores de 40 años y la población vulnerable. ¡Y sigamos con distancia y mascarilla!", ha pedido Von der Leyen, en línea con las recomendaciones del ECDC.
El informe alerta de que el nivel medio actual de consumo de vacunas en la UE/EEE será insuficiente para limitar la carga de casos de COVID-19 y hospitalizaciones durante los meses de invierno. Por tanto, se insta a los países a dar la máxima prioridad a las personas inicialmente objetivo de la vacunación COVID-19 programas que permanecen sin vacunar o que aún no están completamente vacunados.
Asimismo, señala que se debe aumentar la cobertura de vacunación COVID-19 en todos los grupos de edad elegibles, es decir a los mayores de 18 años, pero particularmente a los ancianos, los vulnerables y en los trabajadores de la salud que "deben seguir siendo la prioridad" para las autoridades de salud pública.
En tercer lugar, el ECDE se dirige a los Grupos Asesores Técnicos Nacionales de Inmunización (NITAG) para que estudien la posibilidad de dar cuanto antes la dosis de refuerzo para los mayores de 40 años, y que se abra la consideración a adultos mayores de 18 años, al menos seis meses después de la inmunización completa.
"Dado que las presiones sobre los sistemas de salud pueden surgir debido a la co-circulación de otros virus respiratorios, las medidas de prevención deben implementarse o reforzarse ahora, con esfuerzos para comunicar la importancia de estas medidas de manera temprana, para reducir los contactos y la mezcla durante las fiestas de fin de año", argumenta el informe.
SOLO EL 65% DE LA POBLACIÓN ESTÁ VACUNADA EN LA UE/EEE
El informe advierte de que ritmo semanal de vacunación en la región se ha "desacelerado", y, si acaso sigue desarrollándose gracias a la incorporación de la población más joven. Por este motivo pide llegar a los no vacunados, ya que actualmente solo está inmunizazada con la vacunación completa el 65,4% de la población total y el 76,5% de la población adulta.
Cuatro países todavía informan de menos del 50% de la absorción total de la vacuna en se población. Al respecto, señala que "sigue existiendo una necesidad urgente de cerrar las brechas de inmunidad en la población adulta y garantizar una cobertura eficaz y equitativa en todos los países y regiones de Europa".
El ECDC recuerda que vacunación continúa evitando con éxito muertes, reduciendo las hospitalizaciones y la transmisión en la UE/EEE, a pesar de la aparición y el dominio continuo de la variante Delta, que es hasta un 60% más transmisible que la variante anteriormente dominante, Alpha (B.1.1.7).
Si bien la carga de COVID-19 es particularmente alta en varios países que experimentan una baja absorción de la vacuna, existe evidencia de un aumento de la carga incluso entre los países con una mayor absorción. La situación epidemiológica actual se debe en gran parte a la alta transmisibilidad de la variante Delta, advierte.
La fiestas navideñas se asocian tradicionalmente con actividades como reuniones sociales, compras y viajes, lo que presenta para el ECDC "importantes riesgos adicionales" para la transmisión intensificada de la variante Delta. "Se espera que la infección de la variante Delta sea muy alto en diciembre y enero, a menos que las medidas de protección se apliquen en combinación con los esfuerzos continuos para aumentar la absorción de la vacuna en toda la población", advierte.
"Los pronósticos de modelos destacan la necesidad de las medidas de protección (higiene, mascarilla y distancia) como una medidas inmediata para controlar la transmisión, en combinación con el lanzamiento de dosis de refuerzo de la vacuna para adultos, que deben priorizarse para las personas de 40 años o más, al menos seis meses después de completar un calendario de vacunación primaria. Las dosis de refuerzo mantendrán el control de la transmisión más allá del impacto inmediato de la implementación de las medidas higiénicas de seguridad", manifiesta.
Por otro lado, sobre el certificado COVID digital, un estándar global y el único sistema actualmente en uso internacional para viajeros, advierte de que las evidencias sobre una disminución de la transmisión del SARS-CoV-2 a nivel nacional cuando se usa con fines domésticos, como para el acceso a grandes eventos, restaurantes, cines o museos, es "limitada".