El Partido Popular de Alcalá la Real ha manifestado "su preocupación por la situación de ingobernabilidad en la que se encuentra el Ayuntamiento a raíz de la renuncia a la alcaldía de Elena Víboras sucedida el pasado miércoles y la incapacidad del PSOE para designar a su sustituto", según considera, en una nota de prensa emitida este sábado.
Para Baldomero Andréu, presidente local, “esta situación está afectando notablemente a la gobernabilidad del municipio como pudo comprobarse en el pleno del pasado jueves, donde el PSOE se vio obligado a retirar un punto del orden del día dado que momentáneamente se ha quedado con 10 concejales y sin mayoría absoluta”, y considera que “las reyertas internas que está viviendo el PSOE constituyen un espectáculo vergonzoso para la ciudadanía puesto que se están produciendo por puros intereses personales de dos concejales socialistas caracterizados por su afán de protagonismo que han iniciado una lucha interna para hacerse con la alcaldía”.
"Y es que la situación municipal no está para iniciar guerras internas", continúa asegurando el PP en su nota, para continuar indicando que "tal y como valoraban los populares hace unos días en nota de prensa, Víboras ha dejado el municipio con 13 millones de euros de deuda y un 120% más de paro que cuando llegó en 2007; las urgencias, el nuevo centro de día y una guardería municipal cerradas a cal y canto, el polígono vacío y el Centro Municipal de Deporte y Salud en quiebra”. “Es por ello por lo que el PSOE debería estar preocupándose por encontrar solución a todos estos problemas en lugar de desangrarse en guerras internas, encerrarse en cónclave y mantener al pueblo abandonado hasta que veamos la fumata blanca”.
El PP considera que en el PSOE "se ha producido un auténtico motín a bordo contra Carlos Hinojosa, mano derecha de Elena Víboras y secretario general de los socialistas alcalaínos, que concurrió a las elecciones municipales como número dos y al que en rigor corresponde la alcaldía, pero cuyo liderazgo ha quedado totalmente anulado en su primer día de mandato al no ser reconocido por un sector del PSOE que ahora pretende eliminarlo tras la marcha de Víboras, su mano protectora".
Desde el Partido Popular se pide al PSOE "que realice un ejercicio de responsabilidad y de respeto a las normas democráticas para que aparque sus luchas internas por el bien del municipio, pues lo último que conviene a Alcalá la Real es mantener un equipo de gobierno dividido y enfrentado en los dos años de legislatura que quedan”.