Un oficial de la Policía Nacional junto con un vecino reanimaron a una vecina que llamó a su puerta antes de perder el conocimiento debido a que tenía obstruidas las vías respiratorias al atragantarse con un trozo de carne.
El pasado día 15 de junio sobre las 22:50 un Oficial de Policía Nacional que se encontraba franco de servicio en su domicilio particular fue requerido por su vecinal, la cual llamó insistentemente al timbre mientras con la otra mano se agarraba la zona del cuello. El agente salió rápidamente de su domicilio y preguntó a la vecina si se había atragantado, respondiendo solamente gesticulando con la cabeza diciendo que si. Al ver que la mujer tenía las vías aéreas obstruidas comenzó a realizar la maniobra de Heimlich mientras su esposa llamaba al 061 y al 091 para informar de los hechos y requerir la presencia de los servicios sanitarios.
Después de intentar sin éxito despejar las vías aéreas realizando la maniobra de Heimlich, la mujer perdió el conocimiento y tras tumbarla en el suelo en posición decúbito supino. El agente comprobó que el objeto extraño no se encontraba en el interior de la boca de la víctima y tras verificar que no tenía pulso comenzó a realizar el masaje cardíaco para que el corazón no dejara de bombear sangre a los órganos vitales. Mientras la esposa del agente solicitó ayuda a un vecino que participó en el relevo del masaje cardíaco.
Tras varios minutos insistiendo enérgicamente y sin perder la esperanza, es cuando el agente que estaba realizando el masaje cardíaco, escuchó un pequeño silbido, señal de que estaba introduciendo oxigeno por las vías respiratorias. El vecino exploró la boca de la víctima e introdujo los dedos en su boca y consiguió extraer un trozo de carne de considerable tamaño, volviendo respirar con normalidad cogiendo oxígeno poco a poco a buen ritmo, pero aún en estado inconsciente, por lo que el agentes situó a la víctima en posición lateral de seguridad hasta la llegada de los servicios sanitarios y los compañeros de Policía Nacional.
Una vez personados los servicios sanitarios y tras estabilizar a la paciente fue trasladada al Hospital Universitario Puerta del Mar, en Cádiz, donde quedó ingresada para la realización de las correspondientes pruebas médicas.