El presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cacof), Antonio Mingorance, rechaza el nuevo sistema de subastas de medicamentos que pondrá en marcha la Junta de Andalucía, pero a la vez reconoce que las modificaciones que se han efectuado la convierten en una herramienta mejor que la anterior. Así, el máximo representante reconoce, pese a su "rechazo visceral", que los cambios introducidos en la normativa han optimizado el modelo anterior, algo que, según afirma Mingorance, ha dejado "sin argumentos" todo el arsenal de críticas que tenían los farmacéuticos, según recoge el portal especializado conSalud. Insiste que pese a este rechazo, se han producido una serie de mejoras en relación a los puntos más críticos de las subastas atendiendo a las demandas históricas de los farmacéuticos.
Nos han dejado sin argumentos, ya no hay ninguno. Es perverso en cierto modo, está bien pensado“Nos han dejado sin argumentos, ya no hay ninguno. Es perverso en cierto modo, está bien pensado”, recoge el portal de noticias. Destaca que permitir libertad de elección a los farmacéuticos en los medicamentos a dispensar entre los seleccionados es una de las mejoras más importantes.
Según conSalud, "estas declaraciones ha levantado ampollas entre el colectivio farmacéutico andaluz que señalan a Mingorance, el Consejo Andaluz de Colegios de Farmacúticos (Cacof) y a Bidafarma, como complices de que vuelvan las nuevas subastas a la Junta de Andalucía, traicionando el sentimiento del colectivo farmacéutico y sus socios".
Mingorance hizo estas declaraciones el pasado 10 de diciembre, pero en una entrevista publicada por Diario de Sevilla tres días más tarde afirmó que "nos sentimos discriminados respecto a las farmacias del resto de España”, aseguraba criticando la intención de modificar, pero no de eliminar el actual modelo de subastas para la compra pública de medicamentos.
“Creemos que solo es un maquillaje y que la eliminación de las subastas no se ha llevado a cabo. No es justo ni equitativo. Nos sentimos discriminados del resto de farmacias españolas, al igual que creo que se discrimina a los pacientes andaluces”, declara Mingorance. “Para nosotros la cuestión de fondo es que las subastas sigan en vigor y propicien una vuelta a la situación anterior. No puede ser. Si se dijo que iban a eliminar las subastas, hay que eliminar el artículo de la Ley de Farmacia de Andalucía y eliminar esa posibilidad. Además, si hay un Plan de Genéricos a nivel nacional planteado para obtener una mayor eficiencia en el uso racional de los medicamentos, lo que debemos es ir en sintonía con el resto del país, ¿o vamos a ser en esto diferentes?”, añade.
En esta entrevista se lamenta de que el PP utilizase la supresión del modelo de subastas como una promesa electoral que finalmente no ha llevado a cabo. “Los farmacéuticos hemos estado abiertos a todo, hemos colaborado en esta pandemia, toda la sociedad está ahora sumida en una situación compleja. Vemos las medidas que están tomando los distintos gobiernos autonómicos y ninguna va por este camino. No entiendo que se nos castigue de esta forma. Ha sido un año complicado y extenuante para muchas farmacias”, se queja.
Mingorance destaca que “la subasta pone en manos de cuatro o cinco proveedores el suministro de medicamentos esenciales. No entendemos que esto se vea como una solución para los problemas de la sanidad andaluza. No podemos darlo como bueno”, añade manifestando que las motivaciones económicas no son motivo de peso “para poner a nuestras farmacias en esa inequidad respecto al resto de España”.
“Nosotros lo único que queremos es eliminar la subasta tal como se diseñó. Una vez que se elimine, hay un modelo de prestación farmacéutica y para eso está el Consejo Interterritorial en el que se definen las líneas de la política farmacéutica. Y ahí hay margen para la gestión por parte de las Comunidades, pero ninguna ha querido instaurar este sistema”, concluye su entrevista en Diario de Sevilla. Unas declaraciones que llaman la atención respecto a las efectuadas apenas 72 horas antes en las que aseguraba que los farmacéuticos se habían “quedado sin argumentos”.
Según apostilla el portal sanitario, "el sentimiento del colectivo farmacéutico andaluz es que se ha podido llegar a un pacto entre el Gobierno de Andalucía, el Cacof y Bidafarma, seguramente a espaldas de los colegios de farmacéuticos andaluces, para que vuelvan las subastas de medicamentos que tanto han rechazado".
¿UN PACTO A TRES BANDAS?
La compañía farmacéutica Bidafarma tiene la mayor parte del mercado de los medicamentos en Andalucía. La compañía está presidida por Antonio Pérez Ostos y la vicepresidencia está ocupada por Antonio Mingorance Gutiérrez, el también presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. No pocos farmacéuticos sospechan que el trío con la Junta de Andalucía y el cambio de parecer con la subasta no es mera casualidad.
Lo cierto es que muchos farmacéuticos están en contra de quien les representa. Según recoge elglobal.es, la patronal farmacéutica andaluza Ceofa rechaza “con toda rotundidad” que la Junta de Andalucía implante esta nueva subasta. Según presidente, José Luis Márquez, “lo único que pedimos es que se cumpla lo prometido, antes y después de las últimas elecciones, es decir, la eliminación total de las subastas andaluzas, no la implantación de unas nuevas”. Insiste en que “aunque quieran revestirlas de supuestas ventajas, lo único cierto es que significa un incumplimiento flagrante de su promesa estrella electoral”.
