Peinado aseguró a este diario que “Casado entiende parte del asunto”. Incidió en que “el interlocutor” de la Delegación Provincial de Cultura, en materia de “Bienes de Interés Culturas es el Obispado y en ningún caso las parroquias”. Por tanto, “el convenio marco recoge que los propietarios de los bienes son los que seleccionan qué edificios entrarán en el acuerdo, nunca las parroquias”.
Peinado reiteró que si el templo parroquial de Nuestra Señora de la Palma “no está incluida en dicho convenio marco no es porque la delegación no quiera, sino porque el Obispado no la ha incluido”, incidió la responsable provincial.
Dos Obispados
La delegada provincial de Cultura reconoció “desconocer los problemas que existen, si los hay, entre el Obispado y la parroquia está claro que el propietario” del templo “es la Iglesia” y, en este caso, “nuestro interlocutor en este tipo de cuestiones son los dos obispados que existen en la provincia, el de Cádiz y Ceuta y el de Jerez”, apostilló.
“Ellos son los que ponen sobre la mesa los edificios que se proponen incluir y cada año, en función de la disponibilidad económica se van incluyendo edificios en los convenios marco, pero siempre la selección la realiza el Obispado correspondiente”.
En cualquier caso, Peinado recordó que, al margen de la inclusión o no en el convenio del edificio de la Iglesia, Cultura aportó 60.000 euros para reparar la cubierta, cantidad que fue el 50 % de la inversión, que puso la Junta. Mientras, del 50 % que aporta la Iglesia, el 25 % es de la parroquia y 25 % el Obispado”.
Mientras, la torre sigue acordanada y deteriorándose y va creciendo la indignación de la ciudadanía al comprobar que por el momento no se han adoptado las medidas necesarias.