La Guardia Civil ha detenido a 23 integrantes de una red dedicada al comercio ilegal de especies protegidas en el sur de España que exportaban a países como Marruecos y se ha incautado de más de 280 aves.
Según ha informado en un comunicado, el principal detenido se valía de su puesto de trabajo en una agencia de viajes para estas exportaciones y el volumen del negocio en los últimos cinco años ascendería a más de un millón de euros.
En el marco de la operación ORATRIX, desarrollada en tres fases, el SEPRONA de la Guardia Civil ha incautado más de 280 aves protegidas entre las que hay guacamayos, loros y cacatúas, además de abundante documentación y dinero en efectivo.
Los investigados, bajo el amparo de documentación falsa, criaban durante años parejas de especies que luego intentaban vender en el mercado negro dado que este tipo de especies exóticas tiene una alta demanda y se ha constatado la existencia de rutas de exportación desde España a Marruecos.
La colaboración de la Gendarmería Real Marroquí ha sido fundamental para localizar una ruta de transporte, la cual usaba el interior de los autobuses para esconder y transportar a las aves, según la Guardia Civil.
En España, en algunos casos, utilizaban guacamayos y otras especies de menor valor y las ponían a la venta a través de internet, estafando a los usuarios que nunca recibían sus pájaros o haciéndose pasar por compradores que nunca ingresaban el dinero por las especies demandadas.
Este comercio ilegal reportaba a los detenidos un volumen de negocio de más de 100.000 euros anuales y la valoración de las aves incautadas llega hasta los 550.000 euros.
La situación geográfica de España sitúa al país como puerta de entrada e intermediario hacia Europa y Asia de especies cuyo origen son países de América del Sur.
El desarrollo de este tipo de acciones requiere un intercambio fluido de información, que permita conocer la trazabilidad de las especies en los países de origen y destino para detectar las posibles irregularidades derivadas de su obtención ilegal.
Sin embargo, la relevancia de esta operación reside que se ha constatado un flujo contrario al descubrir la existencia de un mercado emergente ilícito de este tipo de animales hacia países del norte de África.
En la investigación ha resultado fundamental la identificación genética de las especies y su relación paterno filial a través del ADN y se han tomado más de 250 muestras que serán analizadas.
Se ha contado con el apoyo de EUROPOL en el análisis operativo y en el análisis estratégico de la documentación y se ha comprobado y se sigue investigando las rutas de salidas de estas especies al resto de estados miembros y terceros países.
Según la Guardia Civil, en los últimos años el delito medioambiental se ha convertido en una de las actividades más lucrativas moviendo cada año miles de millones de euros y constituye, junto al tráfico de seres humanos y el narcotráfico, una de las amenazas más importantes-
Las primeras actuaciones las llevó a cabo la Fiscalía Delegada de Medio Ambiente de Málaga, y la instrucción judicial ha correspondido al Juzgado 10 de Málaga, y se ha contado con la participación del Museo de Ciencias Naturales de Madrid y la Fundación FIEB (Fundación para la Investigación en Etología y Biodiversidad).
Se investigan delitos de blanqueo de capitales, contrabando, intrusismo profesional y estafa entre otros.
