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La nueva etapa para el PP de Fdez. de Moya

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El congreso provincial del Partido Popular celebrado este pasado fin de semana ha sido todo un éxito para José Enrique Fernández de Moya, reelegido presidente por un abrumador 96,8%. Por tanto se le puede considerar un paseo militar, en un baño de apoyo de la militancia y de líderes como Javier Arenas o Cristóbal Montoro, que no escatimaron en elogios a su preparación y a su hoja de servicios en política. También el evento ha tenido la importancia de ponerle las pilas a un PP que en la oposición debe tener su maquinaria engrasada y capaz de ganarse la confianza de los ciudadanos. Por otro lado es fácil de entender, por las fracturas internas, que el PP necesitaba esta cita para serenarse, aunque a la hora de la verdad se ha demostrado que la alternativa a Fernández de Moya ha sido de escasa entidad, más cualitativa que cuantitativa, en función de los nombres sonoros que la apoyaban, algunos concejales populares en el Ayuntamiento de Jaén, de cuyo grupo por cierto no ha sacado el presidente nombres para su equipo, salvo García Anguita, su segundo de a bordo. La práctica política diaria en el PP desde hace tiempo y legitimada en el congreso, nos dice a las claras que no hay más líder natural que Fernández de Moya, y esto es algo que se ha ganado él a pulso con su trabajo, un parlamentario cumplidor y que hace que en la Cámara se escuche de manera permanente la voz de Jaén. El discurso de sus  contrincantes se caracterizaba en gran medida por una vaciedad no más allá del "quítate tú que me pongo yo", pero no había un discurso más ilusionante que el programa completo y minucioso presentado por el reelegido presidente, quien además ha tenido el acierto de apostar por un espacio de centro, abierto y plural, que se ha reconocido como tal en la presencia e intervención de responsables de organizaciones empresariales y sociales y rector de la Universidad, entre otros.

Ahora su principal reto, por el que se le va a medir políticamente, va a ser el de las elecciones municipales de 2011 en la capital, donde él mismo cuenta con la mayoría de papeletas para encabezar la candidatura. Pero no sólo eso, la asignatura pendiente de los populares es acabar cuanto antes con el lamentable espectáculo que viene dando desde hace años por el enfrentamiento en el seno del grupo de concejales, uno de los grandes motivos para que no revalidaran la mayoría absoluta en los últimos comicios. A Fernández de Moya le asiste ahora toda la legitimidad para actuar con firmeza y autoridad en el caso de Jaén aunque no es incompatible con una actitud previa de reconciliación y de acogimiento a personas con las que ha chocado y en cuyas relaciones debe primar la valía y el interés general del partido. Es una gran oportunidad para hacer que se enmiende un PP local que se ha ido a la deriva y cuyo comportamiento no se merecen sus militantes y simpatizantes y tampoco el conjunto de la sociedad de Jaén.

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