Es la tercera edición tras su retorno a la céntrica plaza de Las Monjas y este año llega más abierta, más accesible y más gastronómica que nunca. La Feria de la Tapa echó a andar este jueves cargada de contenido y con una oferta culinaria para saborear Huelva.
Según detallaba este jueves el presidente de Bareca, Rafael Acevedo, en la inauguración de la Feria de la Tapa, “este año ha cambiado, es abierta, hemos quitado stand y hemos puesto una barra central, y la hemos dedicado más a la vertiente gastronómica porque llevamos diez restauradores de primera línea con cuatro tapas diferentes cada uno”.
Además, para dinamizar la jornada, tendrán actuaciones todos los días, el domingo se celebrará el recuperado concurso a la mejore tapa y también habrá un showcooking de la mano de los profesores del Instituto Superior de Gastronomía (ISG) de Huelva.
El primer año de regreso a la plaza de Las Monjas tuvieron una afluencia de 38.000 personas, el año pasado la cifra ascendió a 45.000 y “este año tenemos que llegar a los 50.000”, afirmó Acevedo, que también quiso acordarse de “aquellos primeros restauradores, Calles del Centro y la FOE, que hicieron todo esto posible”.
Por su parte, el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, indicó que se trata de una feria “con solera, tradicional, una cita en el calendario importante y fundamental para Huelva desde el punto de vista de la promoción, el turismo y la economía”.
También destacó que la Feria de la Tapa “sigue avanzando en accesibilidad, en propuesta estética e incluso en todo aquello que adereza el propio desarrollo de la feria, como los concursos o las actuaciones”.
También se felicitó porque la Feria de la Tapa “ha recuperado el alma, que es la plaza de Las Monjas”.