La Asociación de Agricultores, Ganaderos y Productores (Agrapo), en la provincia de Granada, han alertado del "descontrol del consumo" en los pozos para riego del Altiplano norte y piden a la Confederación Hidrográfica que controle las extracciones y las superficies de riego para que no se abuse de los recursos hídricos.
En una nota, el colectivo pone de manifiesto la posible existencia de un millar de pozos ilegales en el Altiplano, "con la consecuente sobreexplotación de los acuíferos y deterioro de las masas de agua, entre ellas las de abastecimiento humano".
Según Octavio Navarro, de la Comunidad de Regantes de Vélez y Orce, "este hecho ha provocado, entre otros, la desecación de los nacimientos de la Sierra de María y la Sierra de Orce, consecuencias que han sido pagadas por las comunidades de regantes tradicionales que ven cómo se desertifican sus vegas", ha indicado.
Por otro lado, los regantes de las comunidades tradicionales, sobre todo en Caniles, se quejan de que todavía no cuentan con la autorización de los pozos que les hizo la FAO, con objeto de mantener sus caudales concesionales en el estiaje. Censuran así que "se priman las grandes explotaciones superintensivas abastecidas de pozos sin control mientras se condena al ostracismo a los regadíos sociales de las comunidades tradicionales".