El director de la prisión Brians 1 de Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), Josep Font, ha dimitido tras haber recibido amenazas de muerte por parte de algunos trabajadores, ha explicado la consellera de Justicia, Ester Capella.
En una entrevista en TV3 recogida por Europa Press, Capella ha dicho que Font le ha llamado a primera hora de este miércoles para presentar su dimisión, y no ha podido convencerle de lo contrario porque "las personas tienen sus límites".
Ha achacado el malestar de los trabajadores a la decisión de Font de instalar cámaras en Brians 1 para controlar espacios con poca visibilidad, y se ha preguntado "a quien no le puede interesar que un centro penitenciario tenga garantías".
La consellera ha dicho que Brians 1 es una prisión antigua "que requiere remodelaciones, cámaras, un sistema de registros diferente" y Font lo ha implantado en los 15 meses que lleva en el cargo.
"Por su construcción tiene pasillos muy largos, puntos muertos en los que no se ve perfectamente lo que pasa y las cámaras facilitan que se pueda ver todo, es una garantía para los trabajadores y las personas privadas de libertad", ha justificado.
Sin embargo, ha señalado que entre los trabajadores hay "un determinado sector de personas que ven con malos ojos los cambios", y se ha preguntado quién puede no querer que la prisión cuente con un mejor control y cambios sustanciales en la forma de relacionarse de funcionarios e internos.
"NO BAJARÁ LA GUARDIA"
Capella ha advertido de que, aunque Font deje el cargo, la Conselleria "no bajará la guardia" ni renunciará a las políticas de seguridad que ha implantado.
En ese sentido, ha definido a Font como un magnífico profesional implicado en mejorar las prisiones catalanas: "Gran parte de la transformación de los servicios penitenciarios se la debemos a personas como él".
Además, Justicia ha pedido a la Conselleria de Trabajo una mediación, que debe contactar con las partes implicadas para convocarles a una reunión posterior, y Capella ha dicho que se realizan "pruebas grafológicas para determinar los autores" de las pintadas contra Font.
Capella ha detallado que actualmente en Brians 1 hay 94 trabajadores de seguridad de baja, lo que supone casi el 22% de la plantilla, una cifra que ha considerado "muy elevada".