El incendio declarado anoche en Arcos pudo causar una auténtica tragedia dada la proximidad de las llamas con una urbanización donde viven decenas de familias. No obstante, el hotel Hacienda El Santiscal se llevó la peor parte porque en el pastizal contiguo se produjo el incendio. La propietaria del hotel ha narrado hoy a Viva Arcos cómo incluso varios huéspedes alemanes tuvieron que echar un cable, manguera en mano, para que las llamas no alcanzaran el establecimiento. Sin embargo, el humo ha afectado a las paredes exteriores del hotel y las llamas han destrozado un bello seto y quemado un trastero donde guardaban enseres como sillas, mesas, escaleras y herramientas de trabajo. Aunque según los bomberos no hubo que desalojar el hotel, varios clientes se quedaron a las puertas del establecimiento bien entrada la madrugada por temor a que el fuego se extendiera, teniendo en cuenta el fortísimo viento de levante que zarandeó las llamas hasta crear pequeños focos. Posiblemente el fuego se inició junto al canal de riego, de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta, donde las tareas de mantenimiento y limpieza brillan por su ausencia. De hecho, la Junta de Gobierno Local recientemente anunciaba una actuación para la limpieza de los márgenes del canal por la cantidad de pasto y malas yerbas que acumula, tarea que teóricamente corresponde a la Junta.
Según el comunicado de prensa que ha emitido hoy el Consorcio provincial de Bomberos, fue necesaria para la actuación la incorporación de efectivos y vehículos llegados desde Jerez y Villamartín, que junto al de Ubrique son los parques más cercanos. Todos emplearon hasta 20.000 litros de agua para sofocar las llamas que arrasaron dos hectáreas de pastizal y cañaveral. Aunque el fuego quedó controlado en torno a las doce de la noche, hasta las dos de la madrugada no terminaron las tareas de vigilancia, de lo que se encargó un retén especial del plan Infoca. A pesar del esfuerzo humano y de desplazamiento de medios, algunos vecinos han asegurado que la llegada de los bomberos se produjo casi tres cuarto de hora después de la llamada de un vecino al 085. No fue el caso de los bomberos de Arcos, que habrían llegado tan solo unos minutos más tarde tras declararse el fuego. Los efectivos de Jerez y Villamartín, lógicamente, llegaron más tarde.