La tendencia regresiva de la población jienense sigue afianzándose año tras año. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE), la provincia tuvo en el primer semestre de 2017 (el último periodo analizado) el saldo migratorio negativo más elevado de todo el país. En concreto, la diferencia entre los extranjeros que llegaron a Jaén y los jienenses que se fueron de su tierra tuvo un saldo negativo 2.071. Esa cifra ha seguido en aumento con relación al año anterior, pues hay que tener en cuenta que el saldo migratorio de todo el año 2016 fue de 2.722 negativo, mayor que el de otras provincias andaluzas como Córdoba (-2.593), Sevila (-2.435) o Cádiz (-2.042).
El estudio del INE analiza también la evolución en el número de macimientos, defunciones y matrimonios en la provincia. En cuanto a la natalidad, en 2017 se registraron 4.894 alumbramientos en la provincia (921 de ellos en la capital), el dato más bajo de la serie histórica del INE que empezó hace 40 años. Además, otro año más el número de defunciones vuelve a superar al de nacimientos. En concreto, se registraron 6.604 sepelios (992 en la capital), es decir, 1.710 más que los nuevos nacimientos. Finalmente, en cuanto a matrimonios, durante 2017 se celebraron en toda la provincia 2.307 (433 en la capital). De todos ellos, 1.197 se celebraron por la religión católica y 1.104 por lo civil. Es decir, cada vez se estrecha más la brecha entre los matrimonios por la Iglesia católica (que ahora suponen el 51,8%) y los que se celebran por la vía civil (que ya alcanzan el 48% del total) de nupcias.