El estudio determinó que las personas con alta presión diastólica, que es el número bajo en una lectura de la presión sanguínea, tienen más probabilidades de padecer problemas cognitivos, de memoria o relacionados con las destrezas de pensamiento, que las personas con lectura diastólica normal.
Por cada punto (10 puntos en la lectura estadounidense) de incremento en la lectura, las probabilidades de que una persona tenga problemas cognitivos aumentan en un siete por ciento.
Los resultados del muestreo mantuvieron su validez aún después de ser ponderados con otros factores que pueden afectar a las capacidades cognitivas, tales como edad, tabaquismo, nivel de ejercicio, educación, diabetes o colesterol alto.
El estudio involucró a casi 20.000 personas mayores de 45 años de edad.