Los hosteleros del centro de Sevilla han denunciado la proliferación de vendedores ambulantes e ilegales de agua que se colocan en los mismos espacios en lo que están sus veladores, que deben ser retirados de la vía pública por seguridad durante el paso de las cofradías.
"Quito mis cuatro veladores y se pone uno a vender agua no con un carro, sino con dos", se queja uno de los establecimientos afectados, ubicado en la calle Argote de Molina, que ha trasladado la queja a la Asociación de Hosteleros de Sevilla, extremo que no sólo sufre este negocio, sino que es común en algunas de las zonas donde se ubican estos establecimientos, ubicados en calles por las que discurren las cofradías y que, por seguridad, deben retirar los veladores del exterior.
La denuncia la acompañan de dos fotografías en las que se puede observar, desde el interior de los establecimientos, se puede observar a los vendedores ambulantes, con carros de los utilizados en los supermercados, se encuentran vendiendo agua en el exterior del local, justo en el espacio en el que hace unas horas estaban los veladores del bar.
Fuentes de la Asociación de Hosteleros de Sevilla reclaman al Ayuntamiento de Sevilla más inspecciones y más control en la venta ambulante, aunque ponen el énfasis en que "por lo menos, sólo es agua".
