El traspaso de Dani Ceballos al Real Madrid, operado el pasado verano, permitirá al Real Betis dejar "casi a cero la deuda concursal", que actualmente es de 9,2 millones de euros, según ha informado hoy el club verdiblanco en un desayuno de trabajo con periodistas.
El consejo de administración bético ha desglosado algunos detalles de las cuentas del ejercicio 16-17 que presentará en la junta general de accionistas del próximo 23 de noviembre, y cuyo punto más sobresaliente es el saldo casi definitivo de los pagos comprometidos a los acreedores hace cinco años.
Tras acogerse a la Ley Concursal en 2011, el Juzgado número 1 de lo Mercantil de Sevilla aprobó el convenio de acreedores en junio de 2012, fijando un deuda ordinaria de 24 millones de euros, más unos 30 millones que debía a las distintas administraciones.
Otro punto sensible de la economía bética es la construcción del nuevo Gol Sur del estadio Benito Villamarín, una obra que iba a suponer un desembolso de alrededor de 15 millones de euros de los cuales a 30 de junio de 2017 se habían satisfecho casi cuatro quintas partes, 11,3 millones.
Por último, el consejo de administración ha comunicado que ha "doblado la inversión en futbolistas", ya que en el último mercado se gastaron casi treinta millones de euros (29,13), partida en la que se incluyen ventas como las de Cristiano Piccini al Sporting de Lisboa, Petros Matheus al Sao Paulo o Francisco Portillo y Daniel Pacheco al Getafe.
En todo caso, operaciones como por ejemplo el mencionado traspaso de Dani Ceballos al Real Madrid o la compra por ocho millones de Ryad Boudebouz al Montpellier son posteriores al 30 de junio y por tanto quedarán contabilizadas en el presente ejercicio.
Para esta campaña 2017-18, el Betis tiene previsto gastar 86,22 millones de euros e ingresar 87,67, de los cuales algo más de la mitad (unos 45 millones) provendrán de los derechos de televisión, mientras que el resto procederá de partidas como los abonos, la publicidad o su participación en las distintas competiciones.
