La consejera de Educación de la Junta de Andalucía, Adelaida de la Calle, ha indicado este viernes que su departamento "toma todas las precauciones" en la concesión de los servicios de transporte escolar en la región, pero que incidentes como el positivo en droga del conductor de un autobús que se dirigía al IES de Albolote (Granada) "son inevitables".
"Es lo mismo que puede pasar en otra línea de cualquier otro tipo de servicio de transporte y las responsabilidades están ligadas en este caso precisamente a los controles de la Guardia Civil, que deben estar muy permanentes en todo lo que sea el transporte público", ha dicho De la Calle, quien ha añadido que las medidas en casos de este sesgo "se tienen que tomar" con "mucha rigidez y mucha responsabilidad".
En declaraciones a los periodistas tras visitar la jornada de puertas abiertas de la Formación Profesional organizadas por el IES Alhadra de la capital, la consejera ha hecho alusión al expediente informativo incoado por la Delegación Territorial en Granada encaminado, según ha remarcado, a "pedir responsabilidades a todo aquel que corresponde".
"Se van a pedir responsabilidades tanto la empresa como al propio conductor sobre el que, desde luego, se tomarán medidas pertinentes", ha apuntillado.
La Junta de Andalucía ya anunció esta actuación contra la empresa adjudicataria del servicio de transporte escolar del IES de Albolote (Granada) cuyo autobús fue inmovilizado el jueves después de que el conductor, que transportaba 50 alumnos, diese positivo en sustancias derivadas del cannabis en un control de estupefacientes.
Fueron agentes del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Granada en labores de comprobación de las condiciones técnicas de los autobuses que diariamente transportan alumnos quienes comprobaron que uno de estos vehículos, que en ese momento tenía 50 niños a bordo, carecía de la autorización específica para el transporte público de viajeros de uso especial (escolares).
Conforme a la información facilitada por el Instituto Armado en una nota de prensa, una vez que los alumnos accedieron al instituto, el conductor fue sometido a las pruebas de alcoholemia y de detección de consumo de drogas, dando positivo en "cannábicos", por lo que fue inmovilizado el autobús hasta que un conductor alternativo de la empresa se hizo cargo de él.
El conductor ha sido denunciado por una infracción administrativa a la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, sancionada con 1.000 euros y la retirada de seis puntos del permiso de conducir.