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Jerez

El Vinoble menos internacional vuelve para reafirmar su potencial

La alcaldesa inaugura la IX edición del Salón de los Vinos Nobles con la mirada puesta en su rentabilidad y su crecimiento

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El Salón Internacional de los Vinos Nobles, Vinoble 2016, se reencontró ayer con El Alcázar en la que ya es su novena edición tras 18 años celebrándose y un parón hace cuatro por culpa de la crisis económica. La presente cita, que también se llegó a tambalear seriamente, viene con más propósito de enmienda que nunca y es la menos internacional de su historia, pero su potencial y tirón siguen  estando ahí. La alcaldesa, Mamen Sánchez, acompañada por parte de su equipo de Gobierno, representantes de la Junta y del Consejo Regulador, inauguró ayer esta nueva edición,  resaltando la apuesta del Ayuntamiento por el vino “como herramienta de futuro” para seguir rentabilizando su potencialidad económica y “crecer en calidad”.


En este evento, en el que están representadas 26 regiones vitivinícolas, se van a dar cita unos 2.000 profesionales, que podrán encontrar caldos de bodegas alemanas, canadienses, francesas, italianas, portuguesas y españolas, de las que 13 pertenecen al Marco. Pero además el Ayuntamiento, quizás para compensar la notable ausencia de bodegas de otros rincones del mundo, anunció ayer una sorpresa “fuera de programa”, que se  llevará a cabo en la jornada de cierre, con  una cata magistral a las 20.0o horas con la presencia de cinco vinos, los Tokai 6 putonios de Hungria; Coleita Pozas 1967 de Oporto, Portugal; Los Madeira Terrantez de 20 años también de Portugal; los Palo Cortado añada 1987 de González Byass y Chateau d'yquem 1996 de Francia.


Tras “salvar” esta edición, hasta el martes lo que toca es alegrarse de que este evento “haya empezado” y a partir de ahí “empezar a ocuparnos de Vinoble 2018”. El propio director del Consejo Regulador, César Saldaña, aseguró ayer que si bien esta edición no tiene el “carácter internacional que nos gustaría”, sí ha ido “ganando en contenido” conforme se ha ido acercando la fecha. “Estamos sorprendidos por la cantidad de gente que nos está visitando y nos va a visitar”, afirmó ayer, para referirse a la que considera más que nunca una edición de “reafirmación” y de transición.


Una gran “oportunidad”
Esto no quita que haya que solucionar este desequilibrio de presencia de firmas internacionales “trabajándose en este evento desde que termina la edición” y no limitando su promoción y comercialización a los últimos meses previos a esta cita, que es lo que suele ocurrir. 
Para ello, tras advertir  de la “gran oportunidad” que supone Vinoble, subrayó la importancia de “no dejar que se convierta en un simple encuentro de bodegas de Jerez”, puesto que esto ya existe, y abogó por dotarlo de una estructura de trabajo -vía consorcio o colaboración público privada- encabezada por profesionales con una oficina abierta y una página web que periódicamente avance novedades y mantenga vivo Vinoble también los dos años, como ocurre en otros salones internacionales de prestigio. En cualquier caso, el interés y el atractivo de este salón, que este año aumenta sus catas, siguen estando garantizados.

Con Manuel Lozano muy presente

El Ayuntamiento tuvo ayer un  recuerdo muy especial para el enólogo jerezano Manuel Lozano, recientemente fallecido y una referencia a nivel mundial, cuya figura estará muy presente en esta edición de Vinoble con una cata impartida por los almacenistas de Lustau. Su viuda y sus tres hijos asistieron muy emocionados a la apertura.

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