El Congreso volverá a rendir tributo este viernes, por quinto año consecutivo, a las víctimas del terrorismo en un acto en el que, por primera vez se dará voz a los afectados por esta lacra previsiblemente con una intervención de la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maria del Mar Blanco, según han avanzado a Europa Press fuentes parlamentarias.
La Cámara Baja empezó a organizar este homenaje a las víctimas en 2010, bajo la presidencia del socialista José Bono. La Cámara, mediante una declaración institucional suscrita entonces por todos los grupos parlamentario estableció el 27 de junio como el día de recuerdo de a este colectivo. Se eligió esta fecha fue elegida porque coincide con el día en el que ETA, en 1960, asesinó a la bebé Begoña Urroz, considerada la primera víctima de la banda terrorista.
En sus primeras cuatro ediciones, el acto se celebró en el hemiciclo, pero en esta ocasión se trasladará a la Sala Ernest Lluch, exministro socialista asesinado por ETA, lo que permitirá que pueda intervenir una representante del colectivo de afectados por el terrorismo. En anteriores ocasiones, al organizarse en el Salón de Plenos, no podían tomar la palabra.
En 2013, tras la polémica que se generó en torno a este acto, el presidente del Congreso, Jesús Posada, ya se comprometió a buscar otro formato que facilitara la participación de las víctimas. El año pasado finalmente la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) acudió al homenaje, pero otros colectivos mantuvieron el boicot de anteriores ediciones.
Es previsible que, además de la intervención de la presidenta de la Fundación de Víctimas, como en años anteriores sea Posada el que pronuncie un discurso institucional en nombre de toda la Cámara y se guarde un minuto de silencio. Como en años anteriores, se invitará a las principales autoridades del Estado.