Ni en jornadas de cuaresma hay un respiro en las oficinas del Nuevo Colombino. Según ha podido saber Viva Huelva, a través de fuentes cercanas al Recreativo, va en aumento el malestar y la inquietud por el retraso de las nóminas de los trabajadores. Y dicen llevar ya tres meses sin cobrar.
Incluso, ya varios trabajadores estudian la posibilidad de abandonar el club onubense antes de que expiren sus contratos, ya que la situación personal de cada uno es diferente y es comprensible que necesiten lo antes posible ponerse al corriente de pago para sufragar gastos
Además, estas mismas fuentes aseguraron que prevalece una constante tensión entre los miembros del club en el día a día de trabajo.
Hace varias semanas uno de los capitanes del Decano, Fernando Vega, adelantó que estaban sufriendo retrasos en sus nóminas y parece ser que aún no se ha solucionado este desafortunado incidente.
Los mandatarios recreativistas quisieron aclarar a sus profesionales que iban a atravesar unos meses con dificultades y que, para ello, era necesaria la ampliación de capital, que aún sigue su curso.
Sin embargo, según manifestaron a este medio, había una gran incertidumbre en los empleados del club por si éste realizase un esfuerzo económico o no para afrontar el traspaso de Dani Sotres. El culebrón del joven meta ya recreativista de pleno derecho acabó el pasado viernes pero se desconocen los términos del acuerdo, por lo que prevalecen multitud de dudas sobre la importancia de realizar un equipo como el Decano la compra de un futbolista cuando se podría haber pagado las nóminas atrasadas.
En este contexto de dudas dentro de la entidad recreativista cabe reflexionar si ésta es una de las auténticas causas por las que el equipo no funciona. El Decano atraviesa uno de sus peores momentos de la temporada, ya que ha sumado cinco puntos de los últimos 21 posibles. Aún así, el sueño del ascenso a Primera división todavía es posible. Pero si es con sus trabajadores (no sólo futbolistas) cobrando, mejor.
