El tenista español Rafa Nadal se impuso (2-6, 6-3, 7-6(10)) este sábado con oficio y sufrimiento a su compatriota Pablo Andújar para alcanzar la final del torneo de Río de Janeiro, donde se medirá al ucraniano Alexandr Dolgopolov, después de un duelo de semifinales en el que el número uno del mundo tuvo que remontar un primer set en contra y remar hasta lograr la victoria en una agónica muerte súbita.
En el tercer enfrentamiento entre ambos, el tenista conquense estuvo cerca de sumar su primera victoria a base de esfuerzo, entrega y calidad. Andújar puso contra las cuerdas a Nadal, exigido a un esfuerzo físico que no vivía desde el Abierto de Australia, su último torneo, y cerca estuvo de hacer hincar la rodilla al manacorí. Sin embargo, el balear aguantó las embestidas y no perdonó tanto como su rival para alcanzar la tercera final del año en otros tantos torneos.
Después de ceder el primer set, Nadal fue más agresivo pero no mejoró en exceso, lo que le llevó a sufrir de lo lindo para derribar la resistencia de un Andújar que se marcha de Brasil con la cabeza bien alta. Por su parte, Nadal buscará este domingo el segundo título del año, tras ganar en Doha, ante el verdugo de David Ferrer en la otra semifinal.
Andújar jugó a gran nivel durante todo el partido. El cabeza de serie número ocho en la arcilla brasileña castigó con contundencia el pobre saque del mallorquín ya desde el primer juego del partido. De nuevo en el séptimo, el tenista manchego rompió al número uno en Río y terminó de ponerse por delante en el partido con su saque (2-6).
Después de un discreto inicio, Nadal fue a más y en el segundo set empató el partido con un único 'break' en el cuarto juego (6-3). El número uno del mundo dio un paso al frente, en todos los sentidos, y pasó a dominar más los puntos metido en la pista. Además, la efectividad en el saque del balear aumentó y su lectura del servicio de Andújar comenzó a darle más opciones al resto.
A pesar de que Nadal iba de más a menos, el conquense vendió cara su derrota. A Andújar le falló su derecha en momentos clave, como en el segundo juego con opción de 0-2 o el cuarto en otro bola de 'break' desperdiciada, pero se agarró a la pista brasileña obligando al máximo a su rival. Nadal tuvo que salvar momentos críticos con su habitual serenidad en instantes decisivos hasta que encontró su primera bola de 'break', en el séptimo juego, y la aprovechó.
Sin embargo, Andújar volvió a la carga y se recuperó de inmediato castigando a uno de los peores Nadal con su saque. Así se llegó a la muerte súbita, agónica y en la que de nuevo Andújar lo tuvo en su mano. Ambos se intercambiaron los puntos de partidos, tres para cada uno, y en el cuarto llegó la sentencia sufrida del de Manacor.