El tribunal londinense de Westminster ha decretado este viernes la libertad vigilada para el etarra Antonio Troitiño tras ser arrestado ayer, jueves. Según han informado a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista, la Justicia británica ha impuesto al terrorista la obligatoriedad de someterse a una reclusión domiciliaria que será controlada a través de una pulsera telemática.
Estas mismas fuentes han precisado que Troitiño deberá permanecer en el domicilio entre las 19.00 horas y las 7.00 horas. Para corroborar que cumple con este requisito judicial, se le ha aplicado un dispositivo electrónico que deberá llevar permanentemente, y además se le ha impuesto la obligación de comparecer a diario y a la misma hora en la comisaría de Chingford (Londres).
Troitiño, que está a la espera de que se tramite su entrega a España --donde está reclamado por la comisión de un delito de integración en organización terrorista y otro de falsedad en documento oficial-- deberá someterse a estos requisitos hasta el próximo 14 de marzo, fecha en la que se ha fijado una nueva vista para revisar su situación.
El etarra, que fue detenido en Londres por orden del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, no tendrá que presentarse de nuevo ante este tribunal hasta dentro de un mes. En abril de 2011 aprovechó un error en el recuento de su pena para huir de España y fue arrestado de nuevo en junio de 2012 en Reino Unido donde permaneció encarcelado hasta que la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH) anuló la aplicación de la doctrina Parot.
La Audiencia Nacional le acusa ahora de hechos nuevos que podrían suponer su nuevo ingreso en prisión una vez se formalice su entrega y por los que dictó una orden de detención en su contra el pasado mes de enero. Durante su primer arresto en 2012 el miembro de ETA manejaba seis juegos de DNI, dos carnés de conducir y dos tarjetas sanitarias con identidades falsas que le habían sido proporcionados por el aparato logístico de ETA.
Las identidades empleadas en todos los documentos estaban ideadas para intentar que pasara desapercibido. En ellas se empleaban apellidos españoles muy comunes y se da la circunstancia de que únicamente aparece uno de origen vasco, en segundo lugar. Entre los nombres de pila que empleaba figura 'Rufino'.
Las fuentes consultadas aseguran que Troitiño empleó en esos 14 meses en la clandestinidad para integrarse de nuevo en la banda terrorista, en el subaparato de huidos. El aparato logístico de la banda organizó su salida del territorio nacional y le proporcionó la documentación falsificada.
