Los talibán han reivindicado este martes la muerte de cinco soldados extranjeros en un ataque ejecutado el lunes por un 'muyahidin' infiltrado contra una base de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) en la localidad de Sayed Karam, ubicada en la provincia de Paktia (este).
"Un 'muyahidin' infiltrado ha abierto fuego contra invasores extranjeros en el interior de una base en el área de Uzman Jelo, en la localidad de Sayed Karam", ha dicho a primera hora del martes el portavoz de los talibán, Abdulqahar Balji, a través de su cuenta en Twitter.
"Cinco invasores, entre ellos dos oficiales, han muerto y otros cuatro han resultado heridos antes de que el héroe cayera mártir en el tiroteo", ha agregado a través de un segundo 'twit'.
Asimismo, Balji ha asegurado que otros seis "invasores" han fallecido durante la jornada a causa de la explosión de una mina en la localidad de Qarabagh, ubicada en la provincia de Ghazni (este). "La explosión ha hecho trizas un tanque de la ISAF", ha dicho. La Alianza no se ha pronunciado hasta el momento sobre estos incidentes.
En su informe operacional de la jornada, la ISAF ha anunciado la muerte el sábado del alto cargo del Movimiento Islámico de Uzbekistán (IMU) Feda Mohamad durante una operación en la localidad de Balj, ubicada en la provincia homónima (norte).
Asimismo, ha confirmado la muerte el jueves del alto cargo talibán Mulá Hayatulá durante una operación en la localidad de Maiwand, ubicada en la provincia de Kandahar (sur).
"Hayatulá era uno de los altos cargos de los talibán en la ciudad y era responsable de organizar y planificar ataques con explosivos improvisados contra fuerzas afganas y de la coalición", ha dicho la ISAF.