El Ayuntamiento de la ciudad va a extremar las medidas para que la Feria se desarrolle este año con total normalidad. De esta forma, y para evitar la aparición de conflictos, se plantea el horario durante este evento. “Las estadísticas demuestran que a determinadas horas empieza a aparecer la conflictividad y queremos evitar esto con la nueva ordenanza que incide en un paulatino horario de cierre”, ha puntualizado el alcalde de la ciudad, Enrique Moresco.
Una feria que, a pesar de que esta semana se está más pendiente de otro importante evento, va avanzando poco a poco. “El montaje va muy bien y esperamos que este viernes o sábado ya estaremos cerrando las casetas”, ha destacado Gabriel Ganaza, de Los Puitos, empresa responsable de los trabajos
Un montaje de 92 casetas en la que se están empleando 10 personas y cuyos trabajos comenzaron a inicios de mes. Aun así, se espera que los trabajos estén finalizados a mediados del próximo abril, para que los distintos caseteros puedan decorarlas.
En lo referente a la seguridad, Moresco también ha señalado que el botellón, dado el buen resultado que obtuvo el pasado año, se quedará en la misma zona y se controlará la venta de productos contrarios a la normativa.
Asimismo, se desarrollarán reuniones con los caseteros en los que se abordarán diversas medidas para evitar los conflictos o altercados en el interior de las casetas.
Los controles de alcohol y drogas y la regulación al tráfico serán otras de las medidas a tener en cuenta durante este evento.
