La amenaza de huelga indefinida que pendía a partir del próximo 21 de enero sobre el servicio de comedores escolares de Sevilla gestionados por la empresa Brassica Group --encargada de en torno a una veintena de éstos en la provincia sevillana-- debido al conflicto derivado de los impagos salariales, que ya propició el paro durante el 8 y 9 de enero y que mantiene a los transportistas en esta situación desde hace días, ha quedado desactivada con la desconvocatoria de la misma.
El secretario general de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de UGT de Sevilla, Manuel Fernández Algaba, ha indicado a Europa Press que dicha decisión se ha adoptado tras una reunión con la Dirección General del ente de Infraestructuras y Servicios Educativos (ISE) de la Junta, por medio de una asamblea en la que sólo se registraron dos votos en contra de esta opción.
El motivo de la desconvocatoria obedece a que la administración se ha comprometido a la subrogación de los trabajadores en la nueva empresa y a llevar a cabo las gestiones pertinentes para garantizar que perciban los salarios a los que tienen derecho, alegando que "la Junta tiene avales suficientes de Brassica". Al respecto, la plantilla ha dado su conformidad al inicio de los trámites de cuantificación y reclamación salarial correspondiente.
En cuanto a la normalización del servicio, Fernández Algaba ha remitido al próximo lunes, día en el que el personal estará en su puesto para "confirmar si se restablece", aunque al respecto "el ISE nos ha asegurado que hará todos los esfuerzos para que ese día ya haya comida en los colegios, a pesar de que la nueva adjudicataria tendría muy poco tiempo para garantizarla".
Aunque los monitores, desde el inicio del conflicto, no han podido servir comida porque ésta no ha llegado, en un conflicto que se amplía a otros puntos de la geografía andaluza --especialmente en Cádiz--, se han dedicado a tareas "que no se hacen tan habitualmente", como la limpieza, mientras que en algunos colegios, además, han permanecido con niños a los que se ha llegado al acuerdo con los padres de cuidarlos hasta que éstos puedan acercarse a recogerlos.
Los trabajadores, según expuso a Europa Press la delegada de personal Isabel Contreras (UGT), valoran "muy positivamente" la iniciativa de la Junta de Andalucía de proceder a la resolución del contrato con el grupo, al tiempo que piden que se garanticen los cobros de los atrasos salariales. "No hay que olvidar que los principales afectados son niños, y que se deja a muchos padres en la situación de tener que enfrentarse a pedir permisos en sus puestos de trabajo o tener que contar con la ayuda de familiares o vecinos", expone.
La consejera de Educación, Mar Moreno, ha resaltado por su parte que la Junta ha actuado con "total valentía y contundencia" en este asunto, pero ahora tiene que hacer "muy bien los papeles", pues se quiere resolver este contrato con garantías administrativas para que la empresa Brassica Group "no tenga argumentos de recurso". "Un día arriba o abajo, merece la pena que los papeles vayan en condiciones para no tener ningún frente abierto con la empresa", ha apuntado.