La Junta de Gobierno Local ha aprobado las reglas por las que se rigen los concursos para la provisión de puestos de jefaturas de Departamento y Unidad y los criterios de baremación de los méritos. Como explica el teniente de Alcalde delegado de Personal, Javier Durá, "se trata de un nuevo acuerdo también sin precedentes en la historia de este ayuntamiento que demuestra la voluntad clara de este gobierno de poner en marcha mecanismos que permitan la profesionalización de la administración y premien a los empleados con mayor cualificación".
La Junta de Gobierno Local estableció, el pasado mes de octubre de 2012, unos criterios generales que, a modo de propuesta inicial, se sometieron a la negociación con las organizaciones sindicales. Con este objeto, se han celebrado tres sesiones de la Mesa General de Negociación Conjunta del personal funcionario y laboral (22 de noviembre, 4 y 10 de diciembre de 2012) incorporándose al documento originario buena parte de las propuestas formuladas por los representantes de los trabajadores.
El concurso es el procedimiento ordinario para la provisión de puestos de trabajo, y consiste en la valoración de los méritos y capacidades y, en su caso, aptitudes de los candidatos por tribunales de carácter exclusivamente técnico y sin presencia política. Las propuestas de nombramientos que eleven estos tribunales de valoración tienen carácter vinculante para el gobierno municipal.
La RPT ha establecido el marco normativo que regula las condiciones de provisión de los puestos de trabajo por los empleados públicos con predominio del concurso de méritos. El concurso de méritos se convierte en el criterio general para todos los puestos de trabajo, y la libre designación como mecanismo excepcional para cubrir solo algunos puestos caracterizados por su especial responsabilidad y relación de confianza.
Los procedimientos de concurso de mérito hacen posible una verdadera carrera administrativa, de manera que se pueda progresar en la Administración en base a criterios objetivos de idoneidad, valorando la experiencia, la formación acreditada y los estudios superados o la cualificación profesional, entre otros, “quedando definitivamente desterrado el antiguo sistema caracterizado por la arbitrariedad y la subjetividad”, afirma el delegado de Personal.
Javier Durá añade que este procedimiento, además de ser “absolutamente transparente y subjetivo”, va a repercutir “en la mejora de los servicios públicos, debido a que contribuye a que los empleados municipales puedan ofrecer los niveles de calidad en el servicio que la sociedad nos demanda".
