Hace ya tres años que los vecinos de la zona de Parque Verónica ven como las obras de lo que iba a ser el nuevo cuartel de la Guardia Civil de Antequera están totalmente paralizadas. Y según parece el futuro no es mucho más esperanzador ya que un pacto entre los tres agentes implicados en el proyecto (Ayuntamiento, empresa concesionaria e Interior) parece cada vez más lejano.
Así, el alcalde, Manuel Barón, ha decidido mover ficha y en estos días comenzará la tasación de lo construido para de nuevo sentarse a negociar con Vera y Edisol, empresa constructora. «Están tasando todo lo que se ha hecho para ver lo que vale y poner las cifras encima de la mesa en próximos encuentros porque el convenio es muy complicado y hasta ahora no ha habido un acuerdo. Es un convenio a tres bandas, pero obviamente uno de ellos no ha cumplido», dijo Barón.
De este modo, lo que se fijo en un principio es un convenio que cifró las inversiones en 27 millones de euros, y que consistía en que la adjudicataria construiría el nuevo cuartel de la Guardia Civil y un complejo educativo a cambio de conseguir los solares en los que se ubica el actual edificio de la Benemérita para construir en ellos un edificio de viviendas y locales comerciales. No obstante, con la llegada de la crisis ya se desestimó la idea de los solares educativos. «La constructora no ha cumplido la constructora e Interior nos dice que ellos con la empresa no tienen nada, claro lo que el Ayuntamiento fijó con el ministerio es una permuta por la cual le dábamos el nuevo edificio y tres millones de euros y nosotros nos quedábamos con el suelo del actual cuartel», especificó el regidor.
Las posibles soluciones han pasado en este tiempo por varias fases. En un primer intento, el anterior equipo de gobierno socialista, intentó sin éxito modificaciones del convenio para adaptarlo a los precios actuales del suelo. Ahora, sacar adelante las obras de este cuartel y especialmente dejar las actuales instalaciones, que presentan un alto estado de deterioro, se ha convertido en uno de los objetivos del actual regidor. «Todo hay que recomponerlo y ver qué vale lo que ha hecho la constructora y sentarnos de nuevo porque en la última reunión no ha habido acuerdo y está claro que todos tenemos que ceder algo o aplazar compromisos, pero claro nadie quiere pagar lo que ha hecho», asegura el regidor.
Ahora, Barón espera supeditarlo todo a la parcela que ocupa el actual cuartel. «Cuando esté recepcionada por el ayuntamiento, entonces nosotros le liquidarías la parte de la tasación de la construcción respecto también a los incumplimientos hechos, siempre que la obra esté terminada», detalló el regidor.
En esta parte entra el Ministerio del Interior que, según Barón, tiene buena predisposición a participar en la finalización de los trabajos a través de alguna empresa pública «siempre que antes lleguen a un acuerdo empresa y Ayuntamiento», finalizó. El munícipe prevé que las obras necesitarían de unos siete u ocho millones de euros para su total finalización y unos siete meses de obra.
El alcalde de Antequera, Manuel Barón, pidió también por escrito la hace unas semanas la visita a la ciudad del director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, para que pueda ver en primera persona el estado en el que se encuentra el cuartel actualmente y además poner sobre la mesa las posibles soluciones que despejen «de inmediato» el futuro de las obras del nuevo inmueble. Es una de las preocupaciones que tiene también el Consistorio ya que el estado de deterioro del edificio de residencias es muy acusado por la antiguedad que tiene.
El regidor quiere así cerrar el capítulo de unos de los proyectos que más quebraderos de cabeza están dando a los responsables de la ciudad y que definen siempre como de «máxima importancia».