Este elevado crecimiento, que casi duplica el de la media nacional (12,9%), ha venido motivado principalmente por el esfuerzo del sector empresarial, que este último año se ha incrementado un 36%, hasta los 548 millones de euros, junto al crecimiento en la inversión de la Administración Pública (un 19% más, hasta los 336,9 millones) y la Enseñanza Superior (que crece un 12,4%, hasta los 592,8 millones).
De esta forma, el nuevo reparto de la inversión en este último año ha contribuido de manera determinante a mejorar el equilibrio en la balanza entre el sector público y el privado, que aunque sigue inclinándose a favor del primero, viene equiparándose progresivamente en los últimos años.
Así, en 2007 el sector público aporta el 62,8% del total de la inversión, frente al 66,8% que suponía en 2006, mientras que el sector privado contribuye ya con el 37,2% restante, cuatro puntos más que el año anterior, cuando sumaba el 33,2%.
En el reparto total de la inversión en I+D el mayor esfuerzo por parte del sector público se realiza a través de los centros de Educación Superior andaluces, que suman el 40% del total regional, lo que sitúa a Andalucía como la segunda comunidad que más recursos destina a este segmento educativo a nivel nacional, sólo por detrás de Cataluña (677 millones de euros). Le sigue en aportación pública a la I+D la que realiza la Administración Pública de manera directa, que supone el 22,8% del total.
En términos absolutos, Andalucía es, tras Cataluña, la comunidad que registra un mayor incremento en el gasto en I+D, 264,7 millones más que el año anterior. Así, Andalucía se sitúa como la octava comunidad autónoma que más recursos destinan a Investigación, Desarrollo e Innovación, un 1,01% de su PIB, superando por primera vez en esfuerzo inversor a regiones como la Comunidad Valenciana o el Principado de Asturias.
En términos relativos, el gasto en I+D se colocó en el 1,01% del PIB, a sólo 0,26 décimas de la media de España (1,27%) y experimentando un aumento de 11 centésimas respecto al año anterior, reduciendo su diferencial con la media nacional.
El número de personas empleadas en actividades de I+D en Andalucía en equivalencia a jornada completa ha aumentado un 5,2% respecto a 2006, hasta las 22.102 personas, de las que 13.434 fueron hombres (el 60.8%) y 8.668 mujeres (el 39,2%).
Del total del personal investigador en Andalucía, 10.805 personas estuvieron empleadas en el sector universitario (48,9%), 5.769 en el sector privado (26,1%) y 5.527 en administraciones públicas (25%).
Con estos datos, Andalucía se sitúa como la segunda comunidad autónoma, tras Cataluña, que registra un mayor incremento en el gasto en I+D, (264,7 millones más que el año anterior); la tercera comunidad autónoma en inversión total e inversión pública en I+D, número de personal y de investigadores al servicio de la I+D; y la cuarta en inversión empresarial.
Instrumentos para la i+d+i
El cómputo de la actividad de los nuevos instrumentos puestos en marcha por la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresas o CICE (CTA, RETA, CT...) ha provocado un espectacular incremento en las inversiones procedentes de Instituciones Privadas Sin Fines de Lucro (IPSFL) para I+D, que han pasado de 392 millones en 2006 a 730 millones en 2007, prácticamente duplicados en un solo año (un 86,2% mas).
De hecho, una de las principales misiones de la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía (RETA) es la de crear una cultura de cooperación entre las empresas andaluzas y fomentar la innovación y el desarrollo tecnológico, trasladando la capacidad de innovación desarrollada en los parques tecnológicos y el conocimiento de las universidades al conjunto del tejido productivo andaluz para que se transforme en servicios y productos altamente competitivos.
A través de las Agrupaciones Tecnológicas (ubicadas en polígonos industriales, centros tecnológicos o parques tecnológicos), la RETA coopera directamente con las empresas, además de desarrollar y ejecutar varias iniciativas innovadoras, como pueden ser el programa Novapyme, la orden de parques, el proyecto Innproject o el programa Transfer con Citandalucía.
