Según el análisis de la evolución del desempleo que ha publicado hoy el Banco de España y que analiza el período 2005-2011, la reducida antigüedad en una empresa o la temporalidad son los factores que más contribuyen a la entrada al desempleo desde el tercer trimestre de 2007.
Resalta que las probabilidades de salir del paro y encontrar un empleo han pasado de un 43 % en el período anterior a la crisis (de 2005 a 2007) a un 25 % desde 2007 a 2011.
El informe indica que la destrucción de empleo durante la etapa recesiva se ha concentrado particularmente en las ramas de la construcción y de la agricultura y en los trabajadores con contrato temporal, con estudios medios o bajos, menores de 30 años y de nacionalidad extranjera.
Subraya el "impacto negativo" que tiene el tiempo transcurrido en paro sobre la probabilidad de encontrar un puesto de trabajo y añade que "bajo determinadas condiciones el sistema de prestaciones puede reducir la intensidad de búsqueda de empleo".
Según el artículo elaborado por el Servicio de Estudios del Banco de España la tasa de salida de los que llevan menos de seis meses en paro prácticamente duplica desde 2005 a 2011 a la de los parados de larga duración (más de un año).
Asimismo, la probabilidad de quedarse en paro de un ocupado es mayor cuanto menor es su nivel educativo, aunque la recesión económica ha provocado que se haya ampliado la brecha entre los trabajadores con un nivel bajo y alto de estudios.
También por edades, la posibilidad de entrar al desempleo desde un trabajo es mayor cuanto menor sea la edad, en gran parte debido a la incidencia de la temporalidad en los más jóvenes, e igualmente las posibilidades de que los menores de 30 años salgan del paro se han reducido a la mitad.
En este sentido, el Banco de España subraya que "no parece que las distintas medidas para fomentar el empleo juvenil de los últimos años hayan sido efectivas".
También critica las medidas encaminadas a fomentar el uso del contrato indefinido contenidas en la reforma laboral de 2010 y lo argumenta en que las salidas del paro hacia un empleo "se formalizan mayoritariamente" a través de un contrato temporal.
Otro dato que destaca el organismo supervisor es que la crisis ha provocado que si bien hasta 2008 eran las mujeres las que más se quedaban en paro, a partir de esa fecha son los hombres los que más transitan hacia el desempleo.
También recuerda que la "peculiaridad más llamativa" del mercado laboral español es que durante las etapas recesivas la destrucción de empleo es mayor y la creación de empleo menor que en otros países del entorno.