El partido que enfrentó, en la madrugada del lunes al martes (hora española), a los Patriots de Nueva Inglaterra contra los Giants de Nueva York logró reunir a 111.300.000 espectadores y un 71% de share en la cadena NBC. Una cifra que convirtió a esta final en la más vista en la historia del evento deportivo principal del año en Estados Unidos. Según los datos de Nielsen, entre el 45 y el 50 por ciento de los hogares estadounidenses con televisión siguieron el partido que ganaron los Giants por 21-17 a los Patriots en el Lucas Oil Stadium de Indianápolis.
Además, el espectáculo que se celebra en el intermedio de este partido, esta vez protagonizado por Madona, también fue el más visto de toda su historia.
En las primeras imágenes del spot del fllm de Baron Cohen, de Paramount Pictures, aparece la Plaza de España convertida en el escenario donde miles de personas gritan enfurecidas a su líder. La cinta, que se estrenará en breve es una comedia protagonizada por Sacha Baron Cohen y Ben Kingsley, "inspirada" en una novela escrita por el propio Saddam Hussein. En el film, el personaje del protagonista de Ali G anda suelto es un dictador que arriesga su vida por impedir que todo lo que huela a democracia llegue al país que oprime cada día.