La Hermandad de la Vera Cruz celebró un año más la Exaltación de la Santa Cruz. Dentro de unos cultos predicados por el director espiritual, Mario Almario Martín, se llevaba a cabo el Ejercicio de la Santa, Cruz, Solemne Función, con el acompañamiento musical de la Ensemble Jubilate Deo y, a su término, se llevó a cabo el XLIII Pregón de Exaltación a la Santa Cruz. Este año el encargado de realizarlo fue Juan José Castiñeira Bustillo.
La presentación del exaltador corrió a cargo de José Fernández Mora, que relató a través de su amistad con Juan José su trayectoria tanto personal como cofrade.
El exaltador hizo una disertación muy personal, donde a través de momentos cotidianos hizo ver la presencia primordial de la Cruz en la vida del cristiano. Comenzaba con la historia de las crucifixiones, desde época remotas, hasta la actualidad. Proseguía con su exaltación, llevando a los asistentes por los momentos de la Pasión de Cristo y dividió su discurso en varios capítulos, como la aceptación del tormento de la Cruz de Jesús y cómo cada uno acepta la cruz que cada día lleva en su vida. O la Ayuda, cuando a Jesús lo ayudó el Cirinero, “y los cristianos siempre encontramos esa ayuda, apuntó Juan José Castiñeira.
Su disertación finalizó con unos bellos versos centrados en la jornada del Miércoles Santo, cuando la hermandad sale a la calle. Le acompañó musicalmente José González García el cual, al término del acto, haría entrega de una partitura con una nueva marcha dedicada a la hermandad. El hermano mayor Francisco Tocino entregó al exaltador un recuerdo en forma de cruz con lo que se terminaba el acto
