El proceso había comenzado este miércoles, pero en el momento de la apertura no se encontraban en la sala ni Berlusconi ni la joven marroquí Karima El Mahroug, popularmente conocida como 'Ruby'.
Los tres jueces que presiden el Tribunal han declarado "en rebeldía" al mandatario, pese a que el primer ministro había enviado una carta a través de sus abogados en la cual explicaba que no se presentaría a la primera vista a causa de sus "compromisos institucionales".
Berlusconi se acoge así al decreto de 'legítimo impedimento', que permite a los altos cargos no acudir a las vistas por incompatibilidad con los compromisos oficiales vinculados a su cargo, pese a que el Tribunal Constitucional italiano sentenció recientemente que debían ser los jueces ordinarios quienes decidieran si eran justificables estos compromisos.