El cierre fue motivado al detectarse nuevos asentamientos en las calzadas de entrada, en una zona bajo la cual discurre también el tubo arco que ha causado el hundimiento en las calzadas de salida. Por ello, los técnicos del Ayuntamiento consideraron que el origen de ambos problemas era el mismo: los asentamientos y deformaciones que ha sufrido esta estructura del arco. Las lluvias en los últimos días ha acelerado el proceso de arrastre de materiales en las capas inferiores de los firmes, detectándose importantes oquedades en la calzada que desaconsejaban mantener el tráfico rodado en esa zona.
El viernes de la pasada semana comenzaron los trabajos para hormigonar el tubo arco, que estaba ya previsto hacerlo en toda su longitud. Tan pronto se pueda actuar en la superficie, se procederá a la reparación de las calzadas, comenzándose por la que se cerró el sábado. Hoy lunes continuarán los trabajos emprendidos el viernes.