Mas convocó ayer por segunda vez a su Consell Executiu, en una primera reunión ya más “operativa” del Govern, y ha trasladado a todos sus consellers la necesidad de “recortar” todo gasto superfluo y congelar todo aquello que no sea “estrictamente necesario” para “frenar la hemorragia” financiera de la Generalitat.
En este sentido, Mas confirmó que, como primer paso, ha reducido un 23% el número de altos cargos de la Generalitat.